Tras las constantes pifias de los candidatos a las 16 diputaciones federales por Acción Nacional, la tarde del pasado jueves el Señor de los Cerros citó a una reunión urgente en el la Hacienda de Las Bodegas del Molino, propiedad del abanderado azul por el distrito 12, Ángel Trauwitz.
Recibidos uno a uno de los invitados por Miguel Martínez Villalpando, coordinador del candidato anfitrión. 
La reunión que se prolongó por casi 5 horas, fue presidida por el gobernador Moreno Valle, acompañado de su operador de cabecera Eukid Castañón, para fijar las líneas de operación en las últimas dos semanas de campaña.
El principal objetivo fue organizar las estrategias de enlace entre los operadores de campaña con las dependencias estatales encargadas de aterrizar beneficios de programas sociales y obra pública.
La indicación fue muy clara: agilizar los enlaces para que las Secretarías de Infraestructura y Desarrollo Social principalmente, aterricen de inmediato los beneficios a los votantes promovidos.
En contraposición, el panismo enfrentará de manera directa a los diputados federales, a los senadores del PRI y en particular a los delegados federales, con el fin de tender una cortina de humo, mientras los operadores panistas hacen de las suyas.
Por supuesto, el operador en jefe de este plan, es Eukid Castañón, quien salvo un par de excepciones, les ha pegado tremendas reprimendas —por no decir madrizas— a los sumisos candidatos morenovallistas.
Por supuesto, la presencia de Eukid tiene un doble propósito, vigilar la inmediata entrega de recursos y la de imprimir miedo a muchos priistas que aún tiemblan con escuchar el nombre del temido operador morenovallista.
Avanzada la reunión, aparecieron algunos funcionarios estatales y varios presidentes municipales incondicionales al morenovallismo, a quienes se les dieron órdenes precisas para hacer exitoso este plan electoral.
Es tal la decepción por la ineptitud de los candidatos, que el propio Eukid piensa que sería más fácil ganar mandándolos dos semanas de vacaciones, que dejarlos seguir haciendo campaña.
Es evidente que en el búnker panista crece la preocupación y evidencia que a dos semanas de la elección, los esperados acuerdos con el gobierno federal no han llegado.
Que cada día se le abren más frentes al gobernador y que los riesgos de un resultado dividido son latentes.
Es un hecho que las condiciones electorales se han complicado, y que la operación Eukid es un acto desesperado para tratar de mantener la hegemonía morenovallista, rescatando diez de las 16 diputaciones en juego, en el entendido de que el fantasma del 8-8 resulta inaceptable en Casa Puebla.
Y para lograrlo, solo una elección de estado salvaría el barco.
Los primeros pasos se han dado y el resto se darán el día de la elección, en donde lloverán billetes desde la Casona de Los Fuertes.

La cereza del pastel

Cuenta la fuente de este columnista, que para cerrar el encuentro, con su acostumbrado tono, el Señor de los Cerros les prohibió acudir a los debates, diciendo tajante: "si no saben ni hablar y quieren debatir, no mamen".
Así como usted lo lee.