Qué vamos a hacer cuando nuestros antepasados Cholultecas regresen del más allá para jalarnos las patas por haber mancillado sus lugares sagrados, sus teocalis y tumbas.
Ya me imagino a nuestros enriquecidos alcaldes y gobernadores, esos a los que les ha valido un queso las pirámides y sus alrededores para convertirlos en antros, tragaderos y fraccionamientos.
Según el legendario historiador austriaco Ledharth Hundst, en el fondo de la pirámide de Cholula se encuentra enterrado Xolipilixicol—el que se las cobra—, un brujo que tenía un poder extraordinario.
Hacía que el gobernante y los guardias que abusaban de su poder en contra de los maceguales del lugar, les diera un “chorrillo” marca diablo. Si después de este castigo los malvados seguían abusando, entonces,por medio de sus artes mágicas, hacía que la cola se les pudriera.
A pesar de este castigo, los gobernantes y sus guardias siguieron haciendo de las suyas hasta corromper casi a todo el pueblo. Todos se arreglaba con “moches” y favores especiales. En pocas palabras, el que no traía “chorrillo” ya tenía la cola podrida. Tenían que cubrir sus vergüenzas. Así fue como nacieron los taparrabos.
Se pusieron de moda, desde los niños hasta los ancianos, todos usaban taparrabos,nomás que los taparrabos de los gobernadores eran de plumas de quetzal y los del pueblo eran de hojas maíz.
Hoy no usan taparrabos, vancubiertos por los Hugo Boss, los Armani y en los uniformes azules se esconden un montón de colas podridas y “chorrillos: gente con la cola sucia”.
A propósito de cola sucia, a nuestros camoteros gobernantes poblanos les sale su complejo chilango de la manera más chafa: Cierran la Recta a Cholula, por lo que arman un verdadero desmadre, porque todo mundo tiene que circular por el Camino Real que está hecho pinole, mientras que en La Recta no circulan más que tres señoras con carriolas, cuatro babas con patinetas y seis grupitos familiares que sacan a pasear a sus perritos en la vialidad, no marchen. En el DF existen un montón de calles y avenidas por dónde circular cuando cierran Reforma…
Acá se les va a podrir la cola.