1.- Frank Tannenbaumel más grande mexicanólogo de los gringos en el siglo XX acuñó una frase templaría: “Los periodistas que dicen la verdad son publicistas. Los que la ocultan son unos farsantes.
1.1.- En Nuestra casa México, en Nuestra Casa Puebla, saque —si lo desea— la relación de unos y otros.
2.-Aquí uno de los extraordinarios proveedores de arte, por no decir negociantes, es mi amigo —sí, no lo niega—, el profesor Jesús Zepeda Parra.
2.1.- El me contaba desde hace décadas, que nuestro Ser local nos hacia divagar poli-temáticamente en las mesas de Guerrilleros de Café” como expertos en todo, pero todo.
Desde la partícula de Dioshasta la crisis del combustible fósil; pasado por las temáticas hemisferio regional, local, y la familiar del vecindario.
3.- Para ser farsante pasando por experto, me decía: solo hay que tener cuidado que no llegue el que sabe para no ser desenmascarado.
4.- Expertos en la historia religiosa de México hay pocos. En la capital nacional practicante dogmáticamente del centralismo, ubicamos a 9 o 10 de ellos.
4.1.- En Puebla —Las Galiaspoblanas—, unos tres a lo sumo. Nicolás Dávila Peralta es uno de ellos.Creador de textos ha hecho “Entre la Fe y el Poder”, los Caminos de la Iglesia Católica en México.
4.2.-Presentado ortodoxamente: Comentaristas, público seleccionado, alguna nota perdida en algún leído o no leído diario. El texto ya ha de andar de vagabundo en librerías.
5.- Para mi agrado debió ser otra forma de darlo a conocer: empezando por leerlo capitulo por capítulo a sus cuates de igual rango neuronal. Otra leidita sintetizada a los cuates de no tanto cacumen metodizado, halagando con unos sopes, chalupas, o guajolotes, a los difusores sus amigos.
5.1.- El libro fue presentado bajo el ritual pre-escrito por la costumbre.
Acompáñeme con sus Postulados sea usted o no de la religión judeo-occidental-cristiana-católica-apostólica-romana:
P.1.- La iglesia católica aceleró un proceso de retorno al conservadurismo a través de dos estrategias: la reinterpretación de los documentos del Concilio Vaticano II y la represión hacia teólogos, obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos cuyas pos¬turas diferían de las líneas oficiales.
P.2.- En México fue notoria la estrategia del delegado y luego nuncio apostólico Girolamo Prigione en contra de los obispos comprometidos con la Teología de la Liberación: Sergio Méndez Arceo, Samuel Ruiz García, Arturo Lona Reyes, Bartolomé Carrasco Enseño y José Alberto Llaguno Farías (jesuita este último y vicario apostólico de la Tarahumara); sin olvidar la clausura de dos seminarios en donde los futuros clérigos se formaban con criterios no aceptados por esta línea neoconservadora vaticana: el Seminario Interregional Mexicano -a cargo de la Compañía de Jesús- en 1979 y el Seminario Regional del Sureste, que formaba a los seminaristas de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y la diócesis de Tehuacán, clausurado por el entonces obispo de ese lugar, Norberto Rivera Carrera, en 1991.
P.3.-Hoy es evidente que un sector de la jerarquía católica mexicana busca una transformación de las relaciones con el Estado y i/ y de su papel en la vida social que se orienta a un proyecto que parece añorar al "Estado católico" de la época colonial v de los primeros años de vida del México independiente. Laicismo, laicidad, libertad de religión son, entre otros, conceptos que hoy se manejan para sustentar estas aspiraciones.
P.4.-Como ya lo indica el título de este libro, un amplio sector del episcopado mexicano aspira al apoyo del Estado para cumplir su misión evangelizadora, situación que ha llevado a, lamentación de buscar el poder antes que el servicio, la presencia política antes de la acción evangelizadora.
6.- El Jefe de Estado Vaticano, el Papa Francisco tiene difusores por cientos en América, en México, en Puebla. Dávila Peralta es uno de los que construyen Puebla, gracias a la tarea editorial de la BUAP.
Nota del autor. El citado pensador no es mi pariente. Su texto en mi poder ha sido pagado de mi lana.
Nuestra casa
Día con día hay más preocupación social que es la suma de las personales.