Pobladores de Palmarito Tochapan podrían demostrar que la incursión militar del de 3 de mayo, donde murieron 7 civiles, entre estos una mujer y un menor de edad, fue una total violación a los derechos humanos, a la vida, la integridad personal y a la legalidad y seguridad jurídica.
Un grupo de vecinos, entre hombres y mujeres, envió una queja directa a Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), para protestar por los abusos que se cometieron por parte del personal del Ejército Mexicano.
Entre estos resalta lo ocurrido a un adolescente que iba con otro menor a bordo de una motocicleta y fueron atropellados por un Jeep del Ejército Mexicano, a quienes además les dijeron “mueran hijos de diablo”.
Lo mismo ocurrió a otro motociclista que fue necesario que recibiera atención médica por fracturas en la cabeza.
Existe incluso un video donde quedó grabada la ejecución de un vecino de Palmarito Tochapan, donde se aprecia una camioneta cerrada BMW, a las 8:27 horas.
Un grupo de militares amenazó con disparar armas largas; de la unidad fueron bajados tres sospechosos.
Los militares, sin seguir los protocolos de detención, golpearon a uno de los sujetos que vestía pantalón de mezclilla y playera de manga larga oscura con líneas blancas.
A los tres los obligaron a acostarse boca abajo y a las 8:44, el hombre que le comento fue ejecutado de un balazo, disparado por militares.
Resalta también la queja de pobladores enviada a la CNDH, donde puntualizan que los 9 detenidos y trasladados al Cereso de Tepexi de Rodríguez fueron sometidos a tratos crueles, inhumanos y desagradables.
De acuerdo con la queja, los actos de abusos militares iniciaron a las 19:45 horas del miércoles 3 de mayo, cuando los elementos castrenses llegaron al lugar donde lavan las verduras para empacarlas y ejecutaron a un campesino de nombre José Flores Sánchez, sin que estuviera cometiendo algún delito.
Todos estos hechos y otros más que en breve vamos a relatar, motivaron a este grupo de vecinos a solicitar medidas precautorias.
Que los elementos del Ejército Mexicano, destacamentados en la comunidad de Palmarito, se abstengan de realizar detenciones irregulares a los pobladores.
Que se abstengan de realizar operativos en la comunidad, efectuando disparos de arma de fuego.
Que cuando militares detengan a presuntos delincuentes, se sigan los protocolos de revisión de personas y vehículos, bajo el principio de presunción de inocencia, que no los ejecuten y se siga un proceso penal, respetándolo.
Que se establezcan retenes militares fuera de la comunidad de Palmarito Tochapan, de manera que no se exponga a la población civil.
Esas medidas cautelares son para toda la población.
Y no se les debe olvidar que para todo este tipo de actos deben estar acompañados de un visitador de la CNDH.
Luego le doy los detalles.
Nos vemos cuando nos veamos.