Vaya fin de semana para los equipos poblanos. La “maldita” fecha FIFA volvió a dejar secuelas negativas en cuanto a los resultados.
La Franja de Enrique Meza sumó su tercera derrota consecutiva al caer en Querétaro al son de dos goles por uno para poner en entredicho una posible clasificación a la Liguilla.
Un torneo que la verdad pintaba bien. Hasta hace tres semanas todo caminaba de buena manera; sin embargo, a partir de esa dudosa derrota frente al Atlas, todo se vino abajo.
El partido del sábado pasado, con todo y la dificultad que representaba, era una doble oportunidad de sumar puntos para ambos torneos, el actual donde se juega la calificación a la Liguilla y el que viene, donde Puebla es el último en el porcentaje peleando precisamente con Los Gallos; sin embargo, no se pudo sumar al menos un punto para dejar las cosas como estaban.
A falta de 12 puntos por disputarse, La Franja no está eliminada aunque sí ya comprometió su pase a la siguiente fase y tendrá que sumar al menos siete de los puntos que quedan para meterse a la fiesta grande y quedar en mejor posición respecto al próximo torneo.
Se viene Pachuca el próximo viernes en el Cuauhtémoc, equipo que no ha tenido un buen torneo y que viene de caer en casa frente al Monterrey.
La victoria es de urgencia para mantener vivas las posibilidades de trascender en el presente torneo, pues de no lograrse sí estaría limitando sus posibilidades.
Lobos BUAP
Los que no logran ver la suya son los universitarios, quienes sufrieron una dolorosa derrota en casa frente al enrachado Toluca que sumó su sexto triunfo de manera consecutiva.
El esfuerzo está, pero los resultados nada más no se dan y la permanencia en el máximo circuito está más que comprometida.
La salvación sigue estando en manos de los licántropos; sin embargo, el tiempo se agota y los puntos necesarios para quedarse en la Liga MX nada más no llegan.
Quedan 12 puntos en disputa de los cuales seis se jugarán en casa frente a Necaxa y Puebla y seis en calidad de visitantes frente a Cruz Azul y Monterrey, nada fácil la verdad para el equipo de Puente, que honestamente ha perdido el rumbo en este torneo.
Mucho tendrán que valorar los jugadores la posición que hoy tienen en la primera división, pues un posible descenso terminaría con la carrera de varios de ellos, en especial de los veteranos quienes se juegan su última oportunidad en el máximo circuito.
Algunos jugadores del actual plantel tienen la suficiente experiencia para sacar el barco a flote; sin embargo, al pasar de los partidos, los resultados nada más no se dan.
A pesar de todo, la posibilidad está latente y es el momento de sacar la experiencia, el coraje y hambre de triunfo para permanecer en la Liga.
Rafael Puente debe encerrarse con sus jugadores a piedra y lodo y subsanar los errores haciendo un compromiso de verdad para enfrentar los últimos cuatro partidos a muerte, empezando con el del próximo sábado frente a Cruz Azul en la capital del país.
La tranquilidad y el compromiso serán factores que pueden determinar la permanencia del club en la primera división.
Nosotros, como siempre, veremos y diremos.
Hasta la próxima.