Durante cuatro años, organización sociales de todo tipo, algunos grupos relacionados con partidos políticos, colectivos feministas y medios de comunicación pedíamos a gritos que se emitiera la Alerta de Género en Puebla.

En mi caso, lo escribí en diversas columnas, sabiendo que la postura de Rafael Moreno Valle era única y tajante: “la alerta no se emite, porque me afecta en mi proyecto presidencial, ya que sería como reconocer que en mi estado, los feminicidios son mi responsabilidad”.

Como todo durante los tiempos morenovallistas, cada cosa que sucedía en Puebla, debía supeditarse al sueño del Señor de Los Cielos, de llegarse a convertir en el Señor de Los Pinos.

Pese a toda la violencia comprobada y documentada en contra de las mujeres, para Rafael la alerta no era tema.

Como periodista, entiendo perfectamente que la Alerta de Género no va a impedir que sigan sucediendo agresiones contra las mujeres en Puebla.

No es magia.

Pero emitirla, es una postura implícita de un gobierno, de disposición e interés sobre un serio problema social.

Hay que reconocer que Guillermo Pacheco Pulido como gobernador, manda un claro mensaje de interés y preocupación por un punto neurálgico para el estado.

En ese sentido, está ahora acompañado de un personaje en la Secretaría General de Gobierno que ya había demostrado su interés por el tema.

Fernando Manzanilla ya había dado señales claras de que la violencia de género era importante para él.

En una columna de hace poco más de un año, relaté el interés de Manzanilla por este punto en concreto. Aquí un fragmento que refleja al que hoy es el titular de la SGG:

“Contracara 19 marzo 2018

 Manzanilla y la Alerta de Género

 Fernando Manzanilla fue ayer el único candidato que estampó su firma y se comprometió con la Agenda de Género 2018 – 2021 propuesta por la Red Plural de Mujeres.

 En el evento el ex Secretario de Gobierno fue enfático en dos temas: que está a favor de que se solicite la declaratoria de Alerta de Género, con todo y el costo político que ello conlleva; y dos, que durante su paso por la dependencia, los niveles de violencia, en general, y contra las mujeres, eran mucho menores de los que hoy padecemos. En resumen, que la inseguridad y los feminicidios aumentaron.

 La iniciativa logró convocar en un mismo escenario a candidatas y precandidatas de partidos antagónicos como Movimiento Regeneración Nacional –Claudia Rivera Vivanco– y del Revolucionario Institucional –Vanesa Barahona–, y a la abanderada a diputada federal por el Verde Ecologista, Norma Pimentel.

 Las rúbricas estampadas en la lona, fueron acompañadas por mensajes de los candidatos quienes lo mismo citaron la inclusión, que se comprometieron a cumplir con los puntos de la Agenda de Género 2018 – 2021.

 Pero las  ausencias también se notaron. Mónica Lara lo apostilló en su cuenta de Twitter: “Lamentó mucho la ausencia de las mujeres candidatas que no participaron en este compromiso”.

Quizá por prudencia electoral o para no violar las normas, pero los 5 personajes que buscan gobernar el estado: Miguel Barbosa, Martha Erika Alonso, Enrique Doger, Michel Chaín y Alejandro Romero; no estuvieron en el evento.

Veremos si después de que inicien sus respectivas campañas deciden comprometerse con causas como la Equidad de Género, dignificación de las presas, evitar la violencia política hacia las mujeres y la activación de la alerta.”

Tras la cita, se hace evidente que la sensibilidad de Pacheco Pulido y la congruencia de Manzanilla, terminaron reflejadas en lo que debió suceder cuando menos, hace cuatro años.

Al final, pese a la cerrazón sistemática de un oscuro personaje, hoy la alerta está emitida.