Si hace un par de años me hubieran dicho que en el Congreso poblano se aprobaría una ley para tratar de erradicar los crímenes de odio y luchar por el respeto y la tolerancia a la diversidad sexual, francamente lo hubiera dudado.

Durante años, Puebla ha tenido la —bien ganada— fama de mocha y conservadora, de ahí que el tema de legislar a favor de la diversidad sexual y la tolerancia, difícilmente se vería reflejado en la agenda legislativa con base en las cerradas condiciones sociales. 

El sábado 15 de septiembre de 2018, cuando la hoy presidenta de la Comisión de Gobernación, Vianey García Romero rindió protesta como diputada, la bandera multicolor apareció en el Salón de Plenos para inscribirse en la agenda legislativa.

Esta semana, después de un fuerte trabajo de gestión y cabildeo, los diputados de la LX Legislatura aprobaron por unanimidad el decreto por el cual se instruye que el 17 de mayo sea el Día Estatal de la lucha contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia. La propuesta fue precisamente de la diputada Vianey García.

Durante su participación en la tribuna, García Romero, destacó que la iniciativa es resultado del trabajo de diferentes agrupaciones de la sociedad civil que se preocupan y luchan por los derechos del colectivo LGBTTTI y adelantó que continuará impulsando reformas a favor de dichas minorías.

“Puebla tiene derecho a vivir sin odio, nuestro estado debe transitar hacia la libertad, la igualdad y la no discriminación. La 4T tiene la obligación de cumplir con lo dicho en el discurso y llevarlo a los hechos”, fue parte del discurso de la legisladora en redes sociales.

 

En esa misa tónica se pronunció un legislador que llegó precisamente bajo el cobijo de las siglas de Acción Nacional, aunque hoy sea un diputado de la “bancada independiente”. Marcelo García Almaguer destacó en su cuenta de Twitter: “La dignidad es una atributo de todos los seres humanos, no de unos cuantos. Los legisladores de  @FuerzaIndepMX defenderemos los derechos de nueva generación para todos. La discriminación es inadmisible, la exclusión es intolerable y el odio no debería tener cabida en #Puebla”.

El discurso contra la discriminación por preferencia sexual, es parte de esa ruptura de la Puebla mojigata, aunque también el resultado de los cambios ideológicos de algunos políticos: ¿Usted se imagina a Marcelo aplaudiendo y aprobando una iniciativa para impulsar la igualdad y rechazar la discriminación por orientación sexual e identidad de género, bajo el cobijo morenovallista? Impensable.

La voz de la priista Rocío García Olmedo también se escuchó. Dejó en claro que su voto en lo particular era a favor por garantizar los derechos de todas las personas aunque subrayó que en lo particular se abstendría porque la iniciativa, que calificó de histórica”, presentó fallas como la definición de las palabras: Homofobia, Transfobia y Bifobia.

Claro está que la aprobación del tema causó escozor entre los diputados que aún representan al ala conservadora de Puebla, los panistas decidieron retirarse del Salón de Plenos antes que votar y con ello fijar una postura.

Una muestra clara de que algunos diputados aún están más preocupados por el qué dirán, que por garantizar los derechos humanos a todos los poblanos.