La orden fue directa para todo el personal de la Fiscalía General del Estado (FGE), principalmente para los grupos operativos y de manera directa para la Agencia Estatal de Investigación (AEI).

Todos los que se encuentran en la FGE deben presentarse a trabajar el próximo domingo 2 de junio, aunque otros van a ser acuartelados desde los primeros minutos de ese día.

Los vehículos oficiales sólo deben de ser utilizados para una verdadera emergencia y no para transportar tortas, refrescos o personas ajenas a la Fiscalía.

Queda estrictamente prohibido que personal y vehículos de la Fiscalía se acerquen o se quieran meter en donde se van a encontrar las casillas de votación.

Y es que nadie quiere que se repita lo del 1 de julio del 2018.

Nadie quiere volver a ver vehículos oficiales de la Fiscalía, trasladando material electoral, como ocurrió con la camioneta que se volcó y llevaba boletas ya con votos a favor de un solo candidato de la contienda pasada.

Nadie quiere que la Fiscalía de Investigación de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (Fisdai), vuelva a ser utilizada para el rastreo de llamadas o el seguimiento de candidatos y de personajes de la pasada contienda electoral.

Y no es porque el pasado director de la Fisdai, al término de la campaña y el inicio del nuevo gobierno, lo nombraron Secretario de Seguridad Pública del Estado. 

Nadie quiere a otro Fernando Rosales Solís.

Nadie quiere vivir otro violento 1 de julio del 2019.

Nos vemos cuando nos veamos