En breve otro escándalo va a afectar al senador por el partido Morena, Alejandro Armenta Mier, aunque no sea el responsable.
Y es que, todo parece indicar que a sus espaldas, se perpetró una estafa, donde el daño puede ser de 2 millones de pesos.
Resulta que, durante la campaña interna del partido Morena, un grupo de tranzas, recorrieron municipios de lo que se conoce como "El Triángulo Rojo", para pedir apoyos económicos, en especie, además de costosos regalos, para la campaña en favor del, en ese entonces, senador con permiso.
A quienes participaran en el "pase de charola", les ofrecieron chambas, hasta en el Senado, además de obras públicas, cartas de recomendación y todo lo que el lector se puede imaginar.
Entonces cayeron los apoyos de 10, 20, 30 mil pesos y hasta más, además de vehículos, enseres domésticos, equipos de sonido, vídeo, además de cortes finos para trajes, perfumes, muebles, todo lo que se pudo recabar durante la jornada.
Al final no hubo sólo un perdedor, fueron muchos.
Los que le entraron a la coperacha ahora están exigiendo que se cumplan las promesas y poco a poco están perdiendo la paciencia ante la indiferencia de quienes primero no dejaban de molestarnos, en sus casas, negocios y trabajos; y ahora no les contestan ni el celular.
Y no tardan en elevar sus protestas, primero al Senado y después a donde éstas lleguen.
Un tal Raúl, quien podría ser del equipo del senador suplente Jesús Encinas, es el principal implicado.
Y no es la primera vez que lo hace.
Nos vemos cuando nos veamos