Sin duda alguna ha sido etiquetado como el “Mejor Juez que ha tenido la Plaza México”. Escritor prolífero, Médico de profesión, hermano menor del Poeta don Carlos del mismo apellido. Colaborador del escritor Martín Luis Guzmán en la revista “Tiempo de México”, comentarista taurino muy profuso del prestigiado periódico “La Prensa” pasó luego al diario de tinta sepia “Esto”, de donde escribió su muy culta y auténtica biblia: “Cartas Taurinas”, editado como libro signado con el seudónimo de Juan de Marchena. Juez de Plaza en La México donde don Juan Pellicer Cámara + 12 de agosto de 1970 - hace unos días del XLIX Aniversario de su fallecimiento-, compartió y alternó por muchos años el Palco con su colega el Dr. Joel Marín.

Se inició como Juez en el “Toreo de México”, donde recibió del gobierno el encargo de aplicar y vigilar estrictamente el Reglamento, mismo del que él había sido autor del proyecto. Su gran inquietud como escritor y tauro cronista le llevó a crear su otra gran obra, la columna “Puyazos con la punta del lapicero”.

En su honor, homenaje y sincero reconocimiento es que este 'golpea-teclas' titula estas líneas como “Puyazos con la punta de la Pluma”.

Ha sido en la Plaza del Paseo en San Luis Potosí donde Leo Valadéz, el sonriente chaval de Aguas, y eso es lo que más llama la atención a quienes por primera vez le ven torear, su amplia, espontánea y sincera sonrisa, su asombrosa e inherente tranquilidad al torear, eso que mucho se transmite y llega con facilidad a los tendidos: la felicidad que acompaña a la satisfacción del triunfo y así va Leo.

Próxima puerta de cuadrillas: Cedral, S.L.P., adonde estará con toros de “Begoña”, alternando con el mayor de los Adame y Diego Silveti. Luego, para abrir semana el lunes en Santa Clara, Edo. de México, con el de a caballo Andrés Rozó y el llamado “Calita”, para lidiar un encierro de “Torreón de Cañas”.

El toro de nombre “Fantasía” de las dehesas de la Casa de a toros criar de  “Juan Pedro Domecq” ha permitido a Enrique Ponce bordar un toreo de Fantasía en su tarde de reaparición después de 147 días: rehabilitación incluida y concluida por cornada etiquetada de Desastre de la rodilla. Auténtica tarde de Fantasía con un lleno absoluto en los tendidos de la emblemática Plaza del Puerto de Santa María. Lo mejor de esa tarde no ha sido el indulto, ni los trofeos otorgados de manera simbólica, ni los enormes 6 pases 6 de Morante de la Puebla, ni el triunfo de José María Manzanares.

Lo que debe señalarse como lo mejor de la tarde es que había 11000 aficionados llenando esos tendidos y más de la mitad era gente joven, muy joven, mientras afuera, manifestándose en contra, se contaron 45 descerebrados.

En la foto el Maestro Ponce comparte con Manzanares la salida “aupado”. 

Fue en L.A. Cheto, el sábado pasado en el espléndidamente hermoso Valle de Guadalupe en la Baja California, tierra de fértiles viñedos donde la vid se convierte en unos de los mejores y ricos caldos que tiene México; corrida llamada de la Vendimia donde el torero de estas tierras, Jerónimo logró un sonoro triunfo, cortando una oreja a toro de “Xaxay” pero además repitiendo, asegundando el logro del día anterior en Tijuana, el domingo donde salió por Puerta Grande con 2 peludas 2 en las manos, de toros, el primero de “Julio Delgado” y a su segundo de  “El Vergel”, amarrando así un fin de semana rociado de buen vino. 

Ya me despido con palabras del insigne José Luis Ibarra Mazarí: «Me despido quitándome el sombrero o tocando respetuoso el ala, de esos saludos discretos que dicen, “te saludo porque somos decentes, pero no quiero mucha amistad contigo”».