Los derechazos y un par de naturales que logró dar José Antonio Morante Camacho duraron lo que tarda en rezarse un Credo y eso se antojó al verlo; a rezar, diciendo que creemos en un toreo así con esa despaciosidad, (FOTO 1) Aunado a la enorme personalidad y sentimiento muy sevillano para templar un toro que requirió la experiencia de un enfermero terapiointensivista, pues Morante muy bien lo supo llevar con la muleta más que a media altura, y cuando el convaleciente agarraba confianza y envestía, bajando entonces el de La Puebla, la muleta para llevarlo templadísimo y regalarnos con ese toreo que tanto nos gusta.
Todo esto se dio con su 2ndo, lidiado en cuarto lugar de nombre ”Aguanieve”, cárdeno claro, bragado en girón-corrido, de las dehesas de “Bernaldo de Quiroz”, por cierto, y a manera de anécdota: ya concluido el sorteo y una vez que los equipos de los toreros se enteraron del lote que les tocó en suerte, al verlos nuevamente, para “abrir los lotes”, decir cuál echan por delante, se escuchó a ellos decir: - “echamos primero al más chico” a lo que los banderilleros, el peón de confianza, participe importante en el enlotamiento respondió: - “¿los dos juntos…? ¡El que le entendió…le entendió!
Pero lo verdaderamente importante lo valioso de lo que el domingo vimos, es que con el toreo tan lento despacioso del de la Puebla del Rio, cosa que ha entendido e interpreta muy bien, sabiendo que eso es del gusto de la buena afición, su práctica que tanto hemos vistos, parece ya ser una regla, un dictado a seguir: ¡Dios quiera que así sea! Que se termine ya el toreo de gran velocidad que incluye los horribles trapazos, que no solamente carecen de temple, si no también de belleza y plasticidad, eso que la velocidad no puede dar. Fue la faena a su segundo premiada con una peluda.
El más certero comentario lo acuché ya rumbo a abordar el auto de regreso a casa, claramente oímos- - “ Ahora si le dieron su buen baño al Adame”. Al respecto y para reforzar esta opinión de túnel de salida de la Plaza, lo hago con una cita encontrada en las RsSs; citan al celebérrimo y de gran sapiencia taurina Don Joel Marín quien dijo alguna vez hablando de ese tipo de toreo: << “Tan corriente que pegaba toques” >>.
Despacio también, vinieron lentamente; uno a uno, los minutos se hicieron eternos, pero llegaron los 3 avisos 3, para devolver vivo a los corrales de la Plaza al Toro que de manera horrible y dramática recibió hasta 15, sí, quince pinchazos, intentos de descabello, después de horrible estocada pescuecera a cargo de Ernesto Javier Tapia “Calita”. Por cierto, quien llegó a esa muy importante cita titulado; “Representante de la generación perdida”, pues eso muy claramente demostró, que anda muy perdido. Y, aquí va seriamente nuestra opinión: Esto debe terminarse, muy válida es la propuesta actual en España, que después del cuarto intento de descabello, independientemente del número de avisos, vendrá el tercero y el Toro será sacrificado con disparo de dardo instantáneo o descarga eléctrica de muerte inmediata, y terminar con el horrible espectáculo visto de La México el domingo pasado, ya que además esto es motivo de hirientes y encarnizados ataques de los antis.
Va como despedida, texto del Matador “Titino Monteras” (a) José Luis Ibarra Mazari, acerca del gran Gaona, tomado de su libro ”Otro lugar para Rosendo”: << “ Cuando Gaona y Silvetí eran los amos, cuando se toreaban animales grandes, de respeto; cuando su terno rosa y oro aún lucía refulgentes alamares y cuando la gente - palabras suyas - era decente y tenía temor de Dios” >>.