¿Usted se siente seguro cuando camina o transita por las calles de Puebla capital? Le pregunto esto porque ayer la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) reveló que la Angelópolis es la ciudad del país donde los habitantes tienen más temor.
Puebla hoy genera más miedo a sus habitantes que espacios como Ecatepec o Acapulco que históricamente han padecido impactantes actos de inseguridad.
Y cómo no sentirse inseguro en una ciudad donde todos los días escuchamos casos cercanos de atracos en el transporte público, asaltos a cuentahabientes, negocios, casas habitación, robos de autopartes, detonaciones de arma de fuego y venta de drogas.
La ENSU señala que sólo 5 personas de cada 100 encuestadas suben a un transporte público en Puebla con seguridad, el resto, es decir las otras 95 temen por su vida o sus pertenencias cada vez que toman una combi, un micro, un camión e inclusive un taxi, para poder trasladarse de un punto a otro.
El temor es fundado. No existe una semana en que las redes sociales no den cuenta del asalto en la ruta tal o el atraco que sufrió alguna persona al tomar un taxi, ya sea de los rotulados o de los que operan a través de aplicaciones móviles.
El segundo sitio donde los poblanos se sienten más temerosos es en los cajeros automáticos y si usted cree que ese es un tema exclusivo de los fifís deje le cuento que los capitalinos también acusaron que los mercados públicos son otro de los sitios en donde menos seguridad notan los habitantes de la ciudad de los Ángeles.
En descarga de la presidenta municipal, Claudia Rivera, debo insistir en que esta encuesta, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) mide la percepción y lo subrayo, lo que se pregunta es qué tan seguro “se siente”, que no es lo mismo que la realidad.
Y traigo esto a colación porque precisamente uno de los señalamientos que constantemente hacemos al gobierno de Rivera Vivanco y en general a las administraciones emanadas de Morena es su falta de disposición para comunicar los proyectos, programas y estrategias.
En el caso concreto de la capital, no conocemos una estrategia, ni los plazos en que planeen obtener resultados entre los capitalinos. Esta falta de comunicación ha generado lo mismo el rechazo a los bolardos (con razón o no), que el desconocimiento de muchas de las acciones de gobierno que se están realizando, pero que el ciudadano de a pie omite, generando nuevamente una percepción sobre un gobierno que se mantiene de brazos cruzados pese a las urgencias que se viven en una ciudad tan compleja y desigual como lo es la capital poblana.
Comenzarán comparecencias
La próxima semana será interesante en materia de rendición de cuentas. Históricamente las comparecencias de los secretarios han sido espacios donde se realizan importantes revelaciones, incluso en el opaco sexenio de Rafael Moreno Valle, grandes informaciones se obtuvieron de este ejercicio.
Este año el morbo no es menor. Después del macro simulacro del lunes, el martes de la próxima semana, David Méndez Márquez presentará el estado que guarda la Secretaría de Gobernación, la dependencia más importante y la misma que se encarga de la política interna del estado.
Si bien Méndez Márquez ya operaba como subsecretario desde hace algunos meses, en los hechos fue hasta esta semana que recibió el cargo de manera oficial por lo cual será interesante escuchar sus declaraciones en el Pleno del Congreso.
Ese mismo día el vicealmirante Miguel Idelfonso Amezaga Ramírez también informará a los legisladores cuál es el estado que guarda la Seguridad Pública en Puebla y bueno pues ya sabemos que en ese renglón hay mucha pero mucha tela de dónde cortar.