La presidencia del Comité Municipal del PAN en la capital es uno de los puntos más importantes para quienes busquen una oportunidad en el 2021, por eso Genoveva Huerta envió a su alfil —Eduardo Alcántara—a pelear por la presidencia de Puebla.

La línea fue clara. No importaba cómo o a costa de qué, pero Alcántara Montiel debería ser el nuevo presidente del PAN municipal para ir aceitando la maquinaria para el tema de las candidaturas con miras al 2021.

Por supuesto, recursos no faltaron. En Intolerancia Diario documentamos que la presidencia estatal, a cargo de Genoveva Huerta, pagaba a Eduardo Alcántara bajo el concepto de cursos impartidos, incluso cuando ya era candidato para dirigir el PAN capitalino, lo que claramente demostraba un conflicto de interés además de una contienda inequitativa, que a pesar de ello, ganó su oponente Jesús Zaldívar.

Genoveva Huerta también se placeó con  Eduardo Alcántara e incluso consiguió que éste se entrevistara con Marko Cortés. En esa reunión, Alcántara condicionó el desistimiento de su queja ante el Tribunal Electoral del Estado, a que Jesús Zaldívar le cediera espacios en el Comité e incluso pidió hasta de candidaturas.

Lo que Alcántara Montiel no midió, es que los tiempo políticos cambiaron a raíz de la salida de Fernando Manzanilla, quien se dice respaldaba a Genoveva Huerta, y buscaba operar políticamente para que el Tribunal Electoral inclinara su fallo a favor del grupo de la morenovallista.

Ahora Manzanilla Prieto regresó a la Cámara Alta y ya no está en la Secretaría de Gobernación, mientras que David Méndez ha demostrado que tiene cosas más importantes que atender, se antoja muy difícil que la presidenta del blanquiazul concrete la reunión que desea.

A juzgar por lo que hemos visto en los últimos días, el gobernador Luis Miguel Barbosa, sostendrá su palabra y no se entrometerá en la vida interna de Acción Nacional, aunque hay que decirlo, no le disgusta que en la capital se tenga a un personaje como Zaldívar con quien tuvo un ligero trato en el 2010, cuando Jesús apenas iniciaba su carrera.

En el otro extremo, Lalo Alcántara no tiene monedas de cambio para pedirle nada a Marko, ya que no retiró su queja ante el TEEP y los magistrados votaron este miércoles por unanimidad, un fallo que declaró ganador a Jesús Zaldívar e incluso exhibieron algunas de las mentiras que hubo en la impugnación.

Fuentes, generalmente bien informadas, revelaron que como una cortesía, se le advirtió a Alcántara que estaba incurriendo en excesos en la presentación de pruebas e incluso se le informó que se podrían fincar responsabilidades penales, solo que por prudencia los magistrados decidieron no hacerlo.

Así las cosas, el alfil de Genoveva tendrá que seguir viviendo de los cursos de identidad panista y ojalá no se le ocurra dictar un taller sobre los estatutos o la identidad panista, ya que al parecer no los conoce.

En conclusión, el panismo poblano navega sin rumbo porque a la capitana se le extravió el timón.

Ni más, ni menos.