Del buzón de Intolerancia Diario fue tomada una carta donde elementos de la Agencia Estatal de Investigación de la Fiscalía General del Estado, piden se investigue por qué su director Gerardo Mejía Granados, se hace el desentendido para realizar cambios al interior de la corporación que sirvan realmente para eliminar vicios de abusos de autoridad y lo más importante, componendas con el crimen organizado.

La comandancia en cuestión es la Novena, la que se encarga de investigar robo de vehículos, así como la recuperación de los mismos, donde en lugar de comandante a cargo fue nombrado un agente de nombre Sixto Vázquez, a quién tiene toda la responsabilidad de atender el delito de más impacto en Puebla, que es el robo de vehículos de todo tipo.

De entrada le comento que este comandante no es realmente quien manda en ese departamento sino que en realidad es Oswaldo López, de quien los quejosos piden sea investigado, por tener nexos con bandas dedicadas al robo de vehículos, principalmente de traileres.

Destaca la queja que este agente, el que manda por debajo de la mesa, no solo se beneficia con la protección a asaltantes, sino que también le pasa la charola a víctimas de asalto a transporte, porque cuando llegan a recuperar un trailer o camión robado, además de la gratificación forzada, les pide un moche extra, para dejarlos que descarguen la mercancía asegurada, antes de que la unidad sea puesta a disposición.

Además el agente convertido en comandante, extorsiona a automovilistas quienes circulan en un vehículo robado o con sus números remarcados, aunque se trate de comprador de buena fe, pidiéndoles sumas que van de los 20 a los 30 mil pesos.

Y si no le alcanza el deber que gana de manera ilícita, también están los embustes que recibe de parte de empresas de grúas, a quienes lleva para el traslado de vehículos que son asegurados ya sea en operativos o en cateos.

Y toda esta serie de abusos persisten porque el director de la AEI, Mejía Granados, se ha negado a realizar verdaderos cambios en los mandos de la corporación, ya sea por desidia o por compromiso.

Los comandantes que sirvieron a la pasada administración de la FGE, solo los cambiaron de lugar, pero ahí siguen, sin ningún tipo de investigación por su pasado, que los volvió ricos.

También denunciaron que en esta Novena Comandancia, tiene más de 15 años que un grupo de agentes no han sido rotados a otras comandancias, lo que provoca que ya hayan adquirido compromisos con todo tipo de grupos delictivos.

Se trata de los agentes Gildardo García Sánchez, Mauro Gabriel González, Agustín Domínguez González, José Daniel Shomar Álvarez, Salvador Solano Gonzales, quienes desde su llegada solo conocen la Novena comandancia.

De esto que le comento ya debe de estar enterado el Fiscal General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, a quien tampoco parece importante lo que ocurre.

Nos vemos cuando nos veamos.