Se hacen llamar "Los Pechones", se dedican entre otras cosas al asalto a usuarios del transporte público, a los atracos en tiendas comerciales, además del narcomenudeo, el cobro de piso y la extorsión.
Se trata de los hermanos conocidos con los apodos de "Mota" y "Abrek", que tienen un grupo de malosos, que para hacerse sentir más temerarios se dicen una célula del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), como muchos otros grupos se han bautizado en diversos puntos no solo del territorio poblano, sino también nacional.
Su radio de operación es en estos momentos en colonias del oriente de la ciudad de Puebla, entre estas: Bosques de San Sebastián, Bosques de Amalucan y Xonacatepec, donde ya piden cuotas a conductores del transporte público para que no los asalten a ellos y sus pasajeros.
Otros que se han dicho afectados por extorsión, en lo que se conoce como pago de piso o impuesto para poder vender, son los comerciantes ambulantes, que en las periferias de estas colonias tienen locales de venta de alimentos, ropa o enseres a quienes les exigen diversas cantidades de dinero por semana, para que "no sufran accidentes o asaltos".
Para la venta de droga como cocaína, heroína, cristal y otras, utilizan a viciosos de las zonas donde operan, a quienes les pagan dosis para controlar su adicción, sin importarles que puedan ser detenidos, ya que pueden seguir reclutando a más gente del mismo tiempo, sin riesgo de que los puedan implicar.
Una carta de comerciantes de Bosques de San Sebastián, lo mismo que de vecinos, indica que este grupo delictivo no solo no es molestado por las corporaciones de policía, sino que además goza de supervisión directa o protección por parte de sujetos que circulan los vehículos participantes y se dicen de la Policía Ministerial del Estado.
La zona oriente de Puebla es considerado un alto punto de incidencia en delitos como el atraco, robo a transporte público, además de comercialización de drogas, gas y gasolina robadas, por lo que urge que las autoridades correspondientes tomen cartas en el asunto.
Nos vemos cuando nos veamos