La señorial hacienda que data del siglo XVII, San Juan  Quintero, alias Mazarraza, allá a un costado de San Lorenzo Cuapiaxtla, rumbo al Carmen, Teometitla. Los verdes y muy fértiles campos de labor están bien húmedos y no es el rocío, ni por el rico petricor ese olor que se percibe de los campos. Los campos lloran, lloran también en San Diego Coyotepec en las dehesas de la casa de toros de saque, y también en los potreros de crianza en Santa Lucia, allá por Terrenate; derramando lágrimas, se ha ido “l’ amo” don José Ángel López Lima, hombre de campo, ahí formado en las durezas de la vida agrícola. El recuerdo nos emociona y conmueve: mucho, mucho aprendí de mi padre, orgulloso nos decía: en el mercado; de él aprendí  –  hombre de campo, de ajustado sombrero de palma -  a poner letreros sobre los vegetales en venta en los puestos: a sólo 50 centavos el kilo y con letra muy pequeña, antes de la palabra kilo… “el medio… ”  Cuando en ese entonces un kilo costaba 1 peso”  muy buenas ventas el resultado. José Ángel en su despacho ejecutivo en la zona industrial lucía orgulloso junto a la suya, tras el escritorio, una foto de su señor padre con ese sobrero de palma. Por algo aprendió el emprendedor, más que empresario a inventar, crear ideas para meter a la gente por multitudes al “Relicario”.

Mucho aprendió de su Señor Padre el inquieto empresario que a esas labores en el complejo mundo del toro se inició a los 30 años de edad, pronto sus aspiraciones y locuaz deseo de ver una Plaza de Toros llena le llevó a construir El Relicario. Su ingenio innovador predominó, eso le motivo siempre a inventar cosas, novedades para meter a la gente a la Plaza, su Plaza que luego donó a la ciudadanía de Puebla, sin haber nacido aquí. Habló, entabló trato con propietarios de los principales antros de Puebla, así se estableció que los días vienes por la noche con el mismo boleto de entrada al festejo taurino se cubría el acceso, el cover para entrar a los antros…juventud, bella juventud…que llenazos en el Coso de los Fuentes, y después de los toros a continuar la “marcha” en los antros de la avenida Juárez y derredores de Cholula. Todo un éxito, en un año. Espectáculos Taurinos del Altiplano, la empresa por él fundada llegó a dar 38 festejos en 12 meses. Logro increíble junto con un fenómeno Tauro Histórico: los viernes, algunos viernes por la noche, decenas de autos llegaban al Relicario, sus ocupantes, la mayoría jóvenes se bajaban de los autos y preocupados veían alarmados, espantados; todo oscuro, las luces de la Plaza no encendidas…¡No había Toros! Hecho, acontecimiento histórico,  la gente en Puebla llegaba los viernes por la noche al Relicario por costumbre, sin conocer carteles, sin saber si había corrida o no. Llegaban por simple costumbre  ¡Maravilloso! Obra de don José Ángel López Lima.

Una gran herencia, hacendaría, ganadera, de cultivo y manejo de cosechas cafeteras, pero sobre todo, junto a esa herencia deja don José Ángel un enorme legado empresarial, un ejemplo de no doblarse a los tiempos difíciles. Pronto, muy pronto cuando la resignación por la pérdida llegue, la señora María C. Zamora de  López Lima, hijos, nietos tendrán mucho, mucho que hacer para honrar la memoria y con sus actos, de seguro con Miguel Ángel a la cabeza nos mantendrán vivo el recuerdo de ese gran padre, esposo y abuelo. Que Dios Nuestro Señor le tenga ya en su Santa gloria sentado en su Palco de Ganaderos.  FOTOS: Archivo M.A. L. Z.

Éste pasado 6 de noviembre se han cumplido 3 años 3  del fallecimiento del torero Miguel Espinosa “Armillita”, por cierto un gran amigo de Coyotepec y de don José Ángel. Todo un referente del toreo muy a la mexicana, de mucha quietud, sentimiento y eso que tanto preconizamos ahora, el toreo de manos bajas, técnica que el gran Miguel dominó magistralmente aportando una gran valía de mucha transmisión, empaque y enorme impacto en la afición. Esto muy en contra del horripilante toreo que hoy predomina; con capa de manos altas, prácticamente embarrándose el capote por bajo de las axilas con mucho aroma “Old spice”. ¡De ver eso, libramos Santo Señor”. La majestuosidad y el pasmo de las chicuelinas de Armillita perdurarán por siempre en el recuerdo. Toreo de poesía,  tal como escribió el poeta José María Pemán en su obra “Natural”: ”Lento, breve, quieto, fino, con elegante alegría”. FOTO: mosaico de fotos de Tauro Nota.

La despedida hoy son palabras de Messie Pérez Reverte cita en su creación “La Reina del Sur”:  “Qué pasa cuando esperas, y cada aparente derrota te empuja hacia arriba mientras aguardas  despierta al amanecer, el momento en que la vida rectifique su error y golpee de veras, para siempre”.