No es la primera vez que ocurre.

Por lo menos en 5 ocasiones la policía municipal de Tecamachalco ha localizado el mismo número de vehículos que son robados, en casos por separado, en una calle y abandonados en otra colonia del mismo municipio.

Los robos no son con violencia, los automóviles de cualquier tipo son robados cuando se encuentran estacionados y quien se los lleva sólo circula unas 10 calles y lo deja en ese lugar, intacto.

Antes los robos de automóviles ocurrieron de otra forma, los delincuentes muy formalmente fueron a ver a su víctima para avisarles lo que iba a ocurrir, que no era otra cosa que un asalto fingido para despojarlos de sus unidades,

Les piden no denunciar el delito, a cambio de que días después los van a buscar para decirles dónde quedó la unidad robada.

La intención de quienes se llevan los vehículos es que la percepción de inseguridad aumenta en forma considerable.

Antes de estos robos varios residentes de Tecamachalco fueron visitados por personajes de la delincuencia que les pidieron 50 mil pesos, con la amenaza de que a quien no los entregara les detonarían una bomba.

Y así ocurrió en al menos 4 ocasiones, y las redes sociales no dejaron de comentar las extorsiones.

Tampoco un servidor puede dejar de reconocer que en ese municipio sí se han consumado muchos delitos, pero también es cierto lo de esas amenazas y actos que buscan convertir en Tecamachalco una ciudad de mucho peligro.

Y tampoco es extraño que en este mismo municipio haya llegado un grupo de "autodefensas", que con armas de asalto anuncian una lucha contra la delincuencia.

Los grupos aparecieron como presunta consecuencia de los robos de vehículos, de esos que le comente al principio.

¿A quién le interesa en tiempos electorales enrarecer el clima de inseguridad a este municipio?

Es cierto que Tecamachalco se encuentra en medio de todo, del robo de hidrocarburos, de los asaltos en carretera, del tráfico de todo, desde drogas, armas, transportes robados, todos por las carreteras federales que por ahí circulan. 

Pero a alguien se le ocurrió utilizar al municipio para justificar una presencia armada.

¿Quién quiere prenderle fuego a la plaza?

Nos vemos cuando nos veamos.