Hace unos tres años, en 2018, cuando la ola lopezobradorista se convirtió en el tsunami, Gabriel Biestro vio cristalizado su sueño de convertirse en diputado y sin hacer campaña, es decir, por la vía plurinominal.
Ya encaminado, se dijo parte del pueblo y hasta realizó transmisiones en línea en las cuales criticó que Agua de Puebla continuara con su política de cortes del servicio a quienes no pagaban los recibos.
Aunque nunca presentó una iniciativa, como líder de Morena o presidente del Congreso para desprivatizar el servicio en la capital o el estado, sí jugó con esa bandera.
También pospuso en más de tres ocasiones las discusiones para despenalizar el aborto en Puebla y este es uno de los muchos temas que deja pendientes en el Poder Legislativo al pedir licencia para ahora, ir en búsqueda de la presidencia municipal de Puebla.
Tras el anuncio de que el próximo viernes dejará el Congreso, Biestro Medinilla develó que será Nora Merino Escamilla quien ocupe su lugar.
Da gusto, mucho gusto que sea una mujer quien ocupe la presidencia del Congreso casi tanto como curiosidad ante la duda: ¿Qué pensarán las y los demás integrantes de la bancada de Morena sobre que su representante sea alguien que acaba de agregarse, la semana pasada, a la plantilla del partido?
Y subrayo, para que no se mal entienda, en la bancada de Morena existen mujeres que sí llegaron por esas siglas al partido o que han defendido las causas del Movimiento desde antes de rendir protesta, así que ¿Por qué ningunear a sus propios legisladores?¿No que eran diferentes?
AMLO contra los viejitos
Aunque López Obrador siempre ha visto en las personas de la tercera edad a su “voto duro” decidió darles un golpe seco, justamente en el tema de sus pensiones, un dinero ganado con el esfuerzo de muchos años de servicio.
Recientemente la SCJN aprobó que las pensiones de quienes cotizaron en el Issste, entre ellos los maestros, se paguen en Unidades de Medida y Actualización (UMA) y no en Salarios Mínimos como se realizaba hasta el año pasado.
Para simplificar y ejemplificar el caos, un adulto mayor que antes recibía mensualmente una pensión mensual de 4 mil 251 pesos, con la nueva resolución percibirá solamente 2 mil 724 pesos, es decir, que cada uno de nuestros abuelos, padres y jubilados, estarán dejando de percibir la mitad de lo que recibían.
¡Bonita la Cuarta Transformación!