El nombre de Jesús Notario Díaz podría no decirle a usted nada. De hecho, es un personaje muy menor, cuyo logro político más importante ha sido ser presidente municipal de Tecamachalco, en la primera mitad del sexenio de Mario Marín Torres, y haber sido también un abyecto marinista.
Este político cenecista, quien se quedó instalado en el pasado, encabeza la traición al Partido Revolucionario Institucional (PRI), en esa región, cuyo mayor damnificado será el ahora abanderado del Distrito 14 Federal, que comprende esa zona, Alberto Jiménez Merino.
Me explico y cuento: Notario Díaz realizó el examen para ser candidato a diputado por ese distrito, que se extiende casi de lado a lado del sur de la entidad, desde Acatlán hasta Tecamachalco.
Cuando designaron a Jorge Estefan Chidiac como candidato, quiso ser su suplente, pero como no representa nada, fue desdeñado.
Grilló y grilló al exsecretario de Finanzas y propaló por doquier que su correligionario estaba enfermo y que “lo van a bajar”, les decía a todos.
A la vez, Notario se alió -aseguran fuentes de la coalición lopezobradorista- y selló compromisos de apoyar al muy posible candidato de Morena en aquel municipio, Carlos Ignacio Mier Bañuelos, “Nacho Junior”, para los cuates, hijo del coordinador de la bancada morenista en San Lázaro.
El priista traicionero le ofreció al ahora morenista su amor y su apoyo total, a costa de lo poco que representa el PRI allá.
Lo que no sabía Notario Díaz es que Estefan, efectivamente, dejó la candidatura, pero no por enfermedad, sino porque los números muestran que esa posición está, de antemano, perdida para el tricolor.
Estefan, con una jugada maestra, es ahora candidato uno de la lista plurinominal local.
En tanto, en la candidatura del Distrito 14 Federal irá Alberto Jiménez Merino, quien seguramente llevará de suplente a Notario Díaz.
El tema es que el anodino cenecista e irrelevante expresidente municipal, ahora ya trae con Morena el acuerdo de entregarle la plaza.
Uno nunca sabe para quién trabaja
Por cierto, sólo para recordar, lo más relevante mediáticamente que hizo Notario Díaz como alcalde de Tecamachalco fueron dos cosas:
1.- Defender a Mario Marín en el caso Lydia Cacho: “Puebla resistió la invasión de los franceses y ahora Puebla resistirá los embates de otras fuerzas que quieren desestabilizar nuestro estado”, dijo en un rastrero y lamentable un discurso el 3 de marzo de 2006.
2.- Y ese mismo día, encargarles a sus guaruras que golpearan a los reporteros en la gira que realizó Marín a ese municipio. Entre los agredidos estuvieron Salvador Ríos, Joselín Santos y Francisco Rivas Zerón. Que no se diga que no tenemos memoria en el gremio periodístico.