¿Es una pregunta? ¿Quién tiene los muchos muy azules para sentar y poner en orden a la gran mayoría de candidatos a presidentes municipales y otros quehaceres políticos en tiempo de elecciones?
¿Quién primero se la pasó como Samaritano y se dejó caer tres veces e incluso aguantó todas las cachetadas, con tal de hacerse pasar como mártir?
Ese mismo es el verdadero jefe del Triángulo Rojo, al que muchos conocen corriendo por curvas y túneles por donde pasan los ductos, para apoderarse de una parte del tesoro nacional, para después convertirlo en zanahorias para exportación.
Este hombre, que además se hacía acompañar de temibles sujetos que portaban armas de asalto, convocó a una reunión, seguro de contar con todo el apoyo para hacerlo, y además sugirió que nadie faltara, porque era portador de una determinación.
La reunión ocurrió en alguno de los puntos más álgidos del Triángulo Rojo, entre los que se encuentran Quecholac, Tecamachalco, Palmar de Bravo, Tepeaca y Acatzingo.
Andrés Villegas es el personaje que reunió a la pitilla política de la zona.
Y déjeme decirle que la mayoría o los necesarios acudieron, solo para escuchar que Inés Saturnino López Ponce es el hombre fuerte, para la presidencia municipal de Tecamachalco, para que me entienda El Mesías.
Y a partir de ese momento quedaban prohibidos los golpes bajos, piquetes de ojos, mentadas de madre, incluso las malas caras.
Entre los invitados se asomaban personajes como Carlos Navarro, presidente del PSI, además del mismo Inés, que como "Quico", esperaba que todos asistieran a una orden que sobre paso el municipio y pudo haber llegado desde la ciudad de Puebla, así como los representantes de otros candidatos, que pusieron a prueba la fuerza del que invitaba.
Ignacio Mier Bañuelos, otro de los aspirantes, con bandera de Morena, no estuvo presente en la reunión, ni en el saludo de puñito, por lo de la pandemia, pero debió haberle llegado el mensaje.
Eso sí, estuvieron presentes servidores públicos de todas las áreas, para escuchar y no seguir comprando billetes de lotería que no los van a hacer ganar, pues el del boleto fuerte es el expresidente municipal de Tecamachalco, Inés Saturnino López Ponce, ungido por políticos y malandros.
Por cierto, al término de la reunión, el siniestro personaje y su séquito de colaboradores, la mayoría armados, se retiraron de esa escena para llegar a otra donde dictarán una nueva orden.
Las suficientes para garantizar otros tres años de mucha tranquilidad, por completar sus cinco añitos de seguridad.
Nos vemos cuando nos veamos.