Parafraseando a la famosa novela de Televisa conocida por todos los mexicanos, nos podemos dar cuenta que una desgracia como la ocurrida el Sábado pasado en Querétaro, puso a sufrir a los más ricos de la liga encabezados por la FMF y hasta los Gobernadores de los estados de Querétaro, en la persona de Mauricio Kuri y en menor medida al de Jalisco, Enrique Alfaro, quienes tuvieron que mover todo lo que tuvieron a su alcance para tratar de bajar o minimizar el altísimo costo político que podría traerles una desgracia de tal magnitud.

La FMF con su Presidente Mikel Arriola totalmente sorprendido y hasta desorientado en un suceso en el que a decir verdad, no se le desea a nadie tener que enfrentarlo.

Un caos mediático y hasta mundial, la presión de los dueños y hombres de poder de los distintos equipos, cada quien jalando a favor de sus intereses, unos queriendo parar la liga por así convenir a sus intereses, otros tratando de minimizar daños para que la FIFA no vaya a quitar la sede del mundial 2026, otros más poniendo sus barbas a remojar pues es un hecho que este tipo de situaciones han venido creciendo en todos los frentes futbolísticos, no sólo en Querétaro o San Luis, en sedes como Puebla, en mucho menor medida, pero ya vimos cuando vino el Atlas y el León como pateaban a algunos sujetos en el piso ante la complacencia de la seguridad privada del estadio y también como algunas mallas ciclónicas eran derribadas por estos orangutanes mal llamados aficionados.

En otros estadios tanto de primera división como de liga de expansión lo mismo, así es que es un problema que viene creciendo día a día y que si no se detiene de golpe y de tajo en poco tiempo y mucho antes de lo que usted, amigo lector, se imagina, será imposible asistir con tranquilidad a cualquier estadio del país.

Nos pueden ocultar cifras, maquillar, esconder cuerpos y mentir en despoblado sobre lo que ocurrió en Querétaro, el fondo del asunto no son cuántos murieron, sino cómo y por qué están sucediendo este tipo de situaciones en los estadios de fútbol de México.

No son hechos aislados, no sucedieron por casualidad, que los gobiernos no se enganchen queriendo cuidarse las espaldas y sus carreras políticas, que de verdad se haga algo a fondo como sucedió en algún momento en Inglaterra con los ’Hooligans’ a quienes realmente cercaron hasta que acabaron con ellos.

De verdad, más que la mentira, lastima la soberbia y la burla con la que los porristas después de cometer un crimen sigan burlándose de los caídos de manera impune, lo vemos en redes, lo vemos en vivo, lo vemos día a día y nadie hace absolutamente nada por remediarlo.

Foto: Cortesía

Al momento de escribir esta columna y a pesar de que los agresores salen en sus redes incluso con los tenis manchados de sangre, siguen paseándose por la calle con total impunidad y eso de verdad, eso, si lastima a los aficionados al fútbol y a la sociedad en general.