Los sustanciales cambios que propone el presidente al sistema electoral intentarán transitar como reforma constitucional a través de la Cámara de Diputados. Esta reforma hace de todo. Desde establecer un instituto federal de elecciones y consultas, reducir financiamiento a partidos, o rediseñar los plurinominales

Esta reforma, que inexplicablemente diseñaron en conjunto el titular de Aduanas y el de la Unidad de Inteligencia Financiera, incluye una provisión para facilitar el voto electrónico; presentado como una manera de hacer posible la votación de mexicanos en el extranjero, un conveniente que permitirá votar desde casa y el ahorro de unas lanas del presupuesto

El voto del extranjero (EUA) es extremadamente jugoso, pero ha sido impracticable por la logística del voto migrante. El fruto se ha ensanchado a unos 25-30 millones de votos. En la anterior elección, 2018, se recibieron escuálidamente 76 mil votos de Estados Unidos, 98 mil en total.  

Y aunque en este espacio buscamos ampliar la visión hacia el futuro, el voto electrónico es un terrible planteamiento para cualquier democracia. Esta problemática podría imaginársela única por la corrupción y picardía que existe en nuestro país, pero no es así. Votar tiene dos componentes contradictorios: anonimidad y confianza. Votar electrónicamente pudiera interpretarse como presionar un botón en vez de tachar un trozo de papel, pero las diferencias son más profundas.  

Lo primero que puede asociar con electrónico es el internet, pero estas máquinas no podrían estar conectadas puesto que pueden ser hackeadas remotamente. Las máquinas de votación son uno de los principales atractivos a ser vulnerados en la DEF CON de las Vegas, la convención de hackers más famosa del mundo

Votar desde una computadora o teléfono personal presenta los mismos problemas, pero multiplicándolos por cada uno de los votantes. Juntar los votos y su conteo final van por el mismo derrotero

Es en la magnitud donde radica la complicación y la solución, el voto en papel no escala bien en ataques. Usted lo ha visto, a cuanta más gente sale a votar menos influencia tiene el acarreo o la compra de votos, mientras, en el voto digital basta una línea de código maliciosa para traer total caos e incertidumbre. Es cierto que históricamente hemos vivido entre fraudes electorales de papel, pero el problema era el sistema electoral entremezclado con el sistema político en poder.  

Además, aunque el voto digital tiene poco futuro por la falta de consenso legislativo, viendo la incapacidad de este gobierno con lo digital mejor ni tocarlo

El año pasado la Lotería Nacional sufrió un secuestro masivo de información por el grupo hacker ruso Avaddon. Lotenal se negó a pagar y comenzó a ver sus documentos filtrarse. El ataque concluyó cuando el grupo cesó operaciones globales tras atacar 3 mil instituciones y obtener jugosas recompensas en bitcoin

Pero los ataques no deben ser de tan alta tecnología. En lo que extrañamente no se ha vuelto un escándalo nacional el Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunció la semana antepasada que más de 40 mil usuarios tuvieron acceso total a las bases de datos fiscales... con tres cables que salían de los servidores principales

Datos personales, fiscales y patrimoniales de 47 millones de asalariados, 31millones de personas físicas, y 2.3 millones de personas morales. El robo de información, citando a la titular, que comenzó hace 15 años –dos de los titulares del SAT en el inter hoy son ministros de la Suprema Corte– fue descubierto hace dos años, aunque apenas lo anunciara en abril tras una ola de reclamos por robo de devoluciones de saldos a favor

La declaración, dada por la titular Raquel Buenrostro, se dio con total desparpajo, diciendo que no sabían quienes eran porque operaban con nombres de usuario como patito1 o sinvergüenza2. Estamos atascados con tecnología, cuando lo único que queremos son cosas que funcionen.