Así debemos de entender la actuación del Puebla de la franja durante la segunda parte del torneo anterior y la primera del actual; me explico.

Después de un par de empates conseguidos en calidad de visitantes frente al Toluca y el viernes pasado en Tijuana frente a Xolos, podríamos hablar de buenos resultados del equipo de Nicolás Larcamón, 11 puntos de 24 disputados, sin ser nada destacable, sí le permite a la franja mantenerse en puestos de repechaje y con posibilidades aún reales de meterse entre los cuatro primeros.

Sin embargo y acudiendo a los números fríos y reales, la franja, considerando partidos del torneo anterior y el actual, ha obtenido 4 triunfos en 20 partidos, lo cual también nos habla de un descenso en la productividad camotera en la suma de puntos.

Muy cierto es el hecho de que la escuadra no gana mucho pero también pierde poco, lo cual genera que se empate mucho y esa situación provoca que, como sea, la franja se mantenga en el lugar de la tabla que le permite seguir compitiendo y no derrumbarse por completo.

Otro aspecto a considerar es la cantidad de lesiones que han azotado al equipo de la franja, Martínez operado, Aristeguieta fracturado y operado, Gularte desgarrado y jugadores como Omar Fernández, quien no pudo jugar en la frontera por haberse tironeado en el calentamiento y el central Gastón Silva, quien salió golpeado del mismo encuentro, te hablan de una situación que se debe considerar antes de hacer algún juicio sobre el desarrollo del equipo camotero.

Y obviamente todo depende de la manera en que usted, amigo lector, vea el vaso: medio lleno o medio vacío.

Es decir, plantel corto, con muchas lesiones encima y aún así se mantiene perdiendo muy pocos partidos y con chances reales de meterse al menos nuevamente al repechaje, habla de que Larcamón, a decir verdad, es un técnico con recursos, que busca la manera de seguir compitiendo al mismo nivel a pesar de las adversidades y para muestra el empate obtenido en Tijuana a tres goles el viernes pasado después de venir con un déficit de dos goles quedando pocos minutos en el reloj.

Altidore

La llegada del estadounidense Jozy Altidore en sustitución del lesionado Aristeguieta demostró el viernes pasado que cuando el Puebla juega con un centro delantero natural con las características de un Aristeguieta o Altidore, las cosas cambian sustancialmente en el desempeño de la escuadra.

Un equipo que cada que agarra la pelota da sensación de peligro al frente, aunque a decir verdad, con poco ‘punch’, que le permita capitalizar el trabajo de cancha en el marcador.

Sin embargo y ahora por lo mostrado por el norteamericano en el partido anterior, se tiene la esperanza de que con más minutos en el terreno de juego la franja pueda tener más gol y obviamente más posibilidades de triunfo frente a los rivales que cada vez se complican más y que conforme avance este torneo ‘relámpago’ se volverán más complicados de derrotar.

Necaxa y Atlas, los siguientes

Este martes a las 9 de la noche, la franja recibe al Necaxa de Jimmy Lozano, el cual será un partido duro y complicado donde los de Larcamón tendrán que ganar sí o sí para que los empates obtenidos fuera de casa cobren relevancia y más debido a que el próximo sábado se estará visitando al ‘medio hermano’ Atlas en el Jalisco, donde el bicampeón del fútbol mexicano querrá retomar la senda del triunfo debido a que en esta primera mitad del torneo no ha logrado los resultados esperados.

El balón volverá a rodar esta semana de manera permanente y esperemos que ruede a favor del equipo de la franja.

Nosotros como siempre seguiremos en línea.

Hasta la próxima.