¡No que no tronabas, pistolita!

Así merito le pasó al mentado director del IMSS federico, Zoé Robledo Aburto, a quien no le quedó de otra que venir a tierras camoteras, pa’ ponerla de vergüenza ante puras promesas incumplidas de obras.

Así como lo leen, mis valedores, pos el Zoé terminó por embarrarse toda la feis en el concreto de sus promesas malogradas, pos de a tiro por viaje se hizo el loco, luego de jurar y perjurar que habría más hospitales y mejor atención pa’ la banda cemitera.

Y es que no faltaron sus discursos faroleros, de que ahora sí vendría la “buena”, la “mera buena” y hasta “la mera buena sin falla” repartición de lanas del IMSS, pa’ beneficio de todos los poblanos.

Pero nel, mis carnales, si algo caracteriza al Zoé es “hacer de chivos los tamales” y lanzar promesas a lo varil, pa’ ganar tiempo y desafanarse de todas las necesidades del IMSS.

Como quien dice, es su marca personal, el sello de su infamia y hasta el verdadero rostro del IMSS, por eso mismo hay que tenerlo marcando el paso, hacer que se cuadre y obligarlo a cumplir.

Y es que al Zoé no le quedó de otra que tragar saliva y venir a Puebla con la cola entre las patas, pos cómo no, si ya tenía muchas cuentas que saldar con todos los derechohabientes.

Nomás pa’ abrir boca, que siempre sí habrá hospital del IMSS en Amozoc, pero nel, no será en lo inmediato, habrá que esperar chingo de meses pa’ que termine medianamente operando.

Todo, cortesía del Zoé que no supo mover las aguas y ponerse a chambear, es más, hasta el mentado terrenito había y nada que hubiera lanas pa’ construirlo.

De ese calibre, cómo se las gastan en el IMSS, y así en la lista de espera también están la reconstrucción de San Alejandro y el hospital que ya se levanta en Cuautlancingo.

Pero no todo lo que brilla es oro, banda, pos habrá que estar bien pipas pa’ que no terminen siendo “elefantes blancos” que chafean a la primera de cambio, así como nos tienen acostumbrados.

Pos una cosa es cierta, el hospital de Cuautlancingo se construye a marchas forzadas, y será en lo que resta de diciembre cuando deberá estar al tiro, lo que ya levanta serias dudas de qué tan chingón quede.

Y ahí no para la cosa, mis valedores, pos la Netflix el caso de Amozoc es toda una mentada de desinterés y falta de pantos, pos si bien le va quedará de pie hasta el 2024, en pleno año electoral.

Así la cloaca de las falsas promesas y oportunismo que se viven en las entrañas del IMSS federico, y si a esas vamos, ¿cómo andará la delegación camotera?

Pal’ caño. Ahí se las dejo al costo.