La primicia que nos regaló el presidente López Obrador desde hace un par de años y que abonó todo este tiempo, se cumplió.
Justo esa evidente intromisión, nos permite asegurar que continuará durante todo el proceso electoral que ahora sí, ha iniciado, aunque viole la ley, por lo que coincido con las voces que señalan que este proceso y la elección del 2024 será “entre el Estado contra la Ciudadanía”.
Aun así, en un hecho histórico, dos mujeres compitiendo, aunque habrá todavía que esperar a saber a quién postulará el partido MC o no postule, para no enfadar al presidente.
Con una muestra de 12 mil 500 personas encuestadas y la decisión presidencial, Claudia Sheinbaum fue designada. Con 150 mil registros iniciales para poder participar, más de 2 millones 300 mil registros de la ciudadanía en el listado que abrió el Frente Amplio por México y una encuesta dirigida a la población en general, fue elegida Xóchitl Gálvez; sin duda las dos contenderán por la misma posición, pero ambas tuvieron un abordaje completamente diferente.
Hay que reconocer que una larga lucha precedió para llegar a este momento desde 1953 año en que nos fue reconocido el derecho a votar y ser electas. La historia registra solo a cinco mujeres que han sido candidatas a la presidencia de México: Rosario Ibarra de Piedra (1982), Cecilia Soto (1994), Patricia Mercado (2006), Josefina Vázquez Mota (2012) y Margarita Zavala (2018); sin embargo, es la primera vez que dos mujeres son las finalistas en la contienda y nuestro país se acerca con ello a tener por primera vez a una mujer presidenta.
Semana llena de notas políticas en la que conocimos una declaración de enorme trascendencia, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resuelve despenalizar el aborto en México a nivel federal.
Esta importante Resolución determina que ninguna persona puede ser castigada por abortar; que ningún personal de salud podrá ser castigado por practicar un aborto; y que las instituciones de salud pública del país están obligadas a otorgar este servicio, equipo y personal para su práctica.
Un logro que hay que decir es también ciudadano, porque desde hace varias décadas se ha buscado la manera de lograrlo desde distintos abordajes, y la vía de las organizaciones civiles que han encausado desde lo jurisprudencial ha ido permitiendo los Resolutivos para ir avanzando, este último fue un Amparo promovido por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE).
Hay que señalar también que en Puebla en marzo de este año tres organizaciones civiles, el Centro de Análisis, Formación e Iniciativa Social (CAFIS A.C.), el Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) y GIRE, obtuvieron un Amparo en el mismo sentido, pero específicamente para el estado de Puebla.
Por ello la declaratoria de la Corte que dice “Es inconstitucional el sistema jurídico que penaliza el aborto en el Código Penal Federal, ya que viola derechos humanos de las mujeres y de las personas con capacidad de gestar” abona en definitiva a la causa.
El paso siguiente es que los 21 estados de la República Mexicana que aún faltan por derogar las disposiciones que penalizan el aborto -entre ellos Puebla- cumplan con esta disposición; entre tanto acatando lo que implica nuestro sistema federal en México, la sentencia declarada por la SCJN aplica y los estados de las entidades federativas tienen que implementarla.
Hechos históricos sin duda cada vez más cercanos de alcanzarse.
Uno, el que dos mujeres compitan por la presidencia de la República, aunque una de ellas sabíamos de antemano quién era porque el mismo presidente nos había dado la primicia.
El segundo, porque ya no es sólo que no se criminalice el aborto, es decir que las mujeres no pisen la cárcel; ahora también se acelera la ruta de proteger la salud de las mujeres, ya que implica que las Instituciones de Salud Pública no pueden negar este servicio, de manera que las mujeres ya no tendrán que acudir a lugares clandestinos y con ello se asegura la reducción de muertes maternas.
Ahora sí, iniciado el proceso electoral federal esperando que haya más cuidado en la observancia de la ley; y, que esta Resolución de la Corte, sea implementada a la brevedad para que las mujeres que así lo decidan acudan a solicitar este derecho en las instituciones de salud pública.
Ambos hechos históricos nos hacen recordar como bien se ha afirmado que “No se vive igual en cuerpo de mujer que en cuerpo de hombre”.