Con la novedad que donde no se dejan de mover las aguas es en las entrañas de Morena Puebla, pos a la lista de espaldarazos pal’ virtual candidato al gobierno camotero, Alejandro Armenta, ahora se sumó el berrinchudo de Marcelo Ebrard.

Así como lo leen, mis valedores, y es que el Carnal terminó por dar su brazo a torcer y apoyar al mismísimo Alejandro Armenta, en la carrera pa’ ocupar la casona de El Alto.

Es más, serán las estructuras del Chelo quienes también se sumen pa’ operar las próximas votaderas del 2024, incluso, a favor de la Claudia Sheinbaum, rumbo a la presidencia.

Y es que así merito lo dio a conocer Juan Carlos Natale, mano derecha del Carnal en esta Puebla cemitera, lo que al fin da mucho que pensar, mis culebras, sobre todo luego del chismerío que armó cuando la Sheinbaum le apañó la candidatura morenista.

¿Será que el Marcelo busca redimirse y al fin dejarla de hacer cantada, pa’ ponerse a chambear y recuperar la dignidad polaca que aún le queda?

O de plano, mis valedores, ¿hacer ver al interior de Morena que sus bonos todavía valen y de una vez por todas lo dejen de ver como el apestado?

Si bien, banda, todo apoyo termina por sumar pa’ Alejandro Armenta, no deja de llamar la atención que el Carnal buscara el acercamiento y en especial en Puebla, estado prioritario pa’ los intereses morenistas.

No por nada, mis culebras, el encuentro está pactado pal’ próximo 20 de diciembre, a unos cuantos días de arrancar con todo, las susodichas precampañas, y en terrenos camoteros.

Como quien dice, será el Carnal quien se dé el roll por Puebla y busque entrevistarse con Alejandro Armenta, y “de un ave” quede formalizado el apoyo de sus estructuras.

Y es que mi chismoso morenista ya rajó chipotle, que el Chelo ahora sí ya se dio color de lo mal parado que acabó luego del berrinche por no ganar la candidatura presidencial.

Tanto así, que no estaría dispuesto a perder más terreno ante la mirada flamígera del AMLO y, menos, de la Sheinbaum, sobre todo por la cercanía que tienen con el góber Sergio Salomón y el propio Armenta.

Como quien dice, mis carnales, ya se habría topado con la cruel realidad que otro desplante lo dejaría cada vez más lejos de querer recuperar lo perdido rumbo al 2030.

Ahí de mientras, habrá que estar bien pilas de cómo resulta el encuentro entre Ebrard y Armenta.

Y pos ya que andamos bien encarrilados, ¿qué tanta confianza recupera el Chelo entre los morenos, a nada que empiecen las precampañas en esta Puebla camotera?

¡Vaya, vaya, Tacubaya!, todo cae por su propio peso.

Ahí se las dejo al costo.