En la segunda ciudad más importante de Puebla, el presidente Alejandro Barroso Chávez y su Cabildo han violado la ley y como Herodes han decidido imponer sus propias reglas.

Mayra Guadalupe Vázquez Gordillo rindió protesta en octubre pasado como regidora, pero más tardó en decir ‘sí, protesto’ que en presentar su renuncia.

En esas fechas se informó que por motivos personales, Mayra Vázquez dejaría el espacio que había conseguido de la mano de Morena y que en consecuencia, su suplente, Karina Xúchitl González, llegaría al Cabildo.

La llegada de Xúchitl González, cuñada del alcalde, al cuerpo edilicio fue una irregularidad, principalmente porque debemos recordar que los cargos públicos, como las regidurías son irrenunciables.

La Ley Orgánica Municipal de Tehuacán en su Artículo 243 establece que sólo hay tres causas para “renunciar al cargo de Regidor”. La primera es “ser electo o nombrado para desempeñar algún cargo o empleo público diverso”; la segunda, “el cambio de residencia”; y la tercera, “tener 65 años de edad”.

En el caso de la morenista no se cumplía con ninguna de estas opciones, aún así se dio entrada a la suplente y Mayra Vázquez Gordillo llegó, presuntamente por un acuerdo político, al DIF de Tehuacán. Ahí operó y cobró varios meses hasta que algo sucedió y la mandaron al Instituto Municipal de la Mujer de Tehuacán.

Ahora Vázquez Gordillo ha solicitado regresar al Cabildo argumentando que el presidente municipal, Alejandro Barroso Chávez, la obligó a firmar su renuncia, para incluir en el Cabildo de Tehuacán a su familiar.

En el exceso del nepotismo, la cuñada, no es la única persona cercana al edil que cobra del erario de Tehuacán, se sabe que el esposo de Karina Xúchitl González también estaría en la nómina del municipio.

A la par de este escándalo, se ha difundido un segundo escrito en donde Mayra Vázquez habría solicitado licencia, una figura completamente diferente a la renuncia. Este documento oficial presenta una firma completamente distinta, por lo que se presume que alguien estaría incurriendo en el delito de falsificación.

El escándalo que llega desde Tehuacán refleja a un presidente municipal morenista dispuesto a todo para imponer sus reglas, incluso violando la ley.

¿Alguien tomará cartas en el asunto o lo dejarán saquear el municipio?

Veremos y diremos.

Registros de chocolate en el Congreso

El tema de los foros para socializar la Ley contra el Ciberasedio cada día se enreda más. Anoche, alrededor de las 22:00 horas, con menos de 24 horas de anticipación, se abrió la plataforma para que se registraran las personas interesadas en asistir y también quienes quisieran exponer su postura.

El registro es relativamente fácil, nueve preguntas, entre ellas el nombre, email, celular y la edad de la persona.

Lo absurdo son las ‘letras chiquitas’ que establecieron que sólo los 10 primeros solicitantes podrían exponer su punto de vista o inquietud y claro, entre las preguntas se solicita: “Agregue su participación”.

Después de enviar el cuestionario virtual nada le garantiza a los interesados que serán aceptados en los foros. No llega ningún mail de confirmación ni mensaje al celular, tampoco hay alguna herramienta de transparencia que nos permita confirmar si nuestra solicitud fue la 5, la 11 o la 500.

Una vez más los diputados olvidan ese refrán de ‘No hagas cosas buenas que parezcan malas’.

Si realmente los diputados estuvieran interesados en conocer cómo mejorar la llamada Ley contra el Ciberacoso y el polémico Artículo 480 del Código Penal, bastaría conque se dieran unos minutos para leer las columnas en donde he escrito con mucha puntualidad los excesos legislativos y la falta de taxatividad que presenta esta reforma.

Es cuestión de voluntad, no de circo.

Ni más ni menos.