México y seis países de Centroamérica refrendaron su compromiso de proteger y atender "de la mejor manera posible" las necesidades de los cientos de miles de personas desplazadas forzosamente en la región, informó una fuente de la ONU.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) precisó en un comunicado que Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Panamá, que en su conjunto integran el Marco Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS), se reunieron en su tercer cónclave anual para evaluar la situación actual y trazaron políticas nacionales y regionales para abordar el fenómeno del desplazamiento con respuestas integrales que abarquen las áreas de protección, educación, salud, medios de vida y empleo a las personas que han tenido que huir de sus comunidades.
La violencia y la persecución han obligado a casi un millón de personas en Centroamérica a huir dentro o a través de las fronteras de sus países. Estas incluyen unas 833 mil personas del Norte de Centroamérica y otras 108 mil de Nicaragua.
Tanto las causas subyacentes que han provocado estas crisis de desplazamiento forzado, como los desafíos de integración en comunidades de acogida han sido exacerbadas por emergencias como la Covid-19 y recientes tormentas tropicales que causaron extensos daños, de acuerdo a lo reportado por los países participantes al encuentro.
El Alto Comisionado Filippo Grandi, consideró que es ahora precisamente en este momento de crisis y desafíos para proteger y asistir a los desplazados cuando el Marco Integral Regional "se revela como testimonio del papel fundamental de la cooperación regional y del sentimiento de responsabilidad compartida que encarna".
El ACNUR afirmó que el marco avanza como instrumento político y operativo para responder a las necesidades humanitarias y de desarrollo de cientos de miles de personas, tanto las que huyen como las que las acogen.