“La instrucción que tenían los policías presentes en la pasada marcha del 8 de marzo, con motivo del Día Internacional de la Mujer, era de ser observadores, por lo que no tenían ninguna arma, ni gas lacrimógeno”, manifestó el encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Maximino Hernández Pulido.
Aclaró que cuando un grupo de feministas intentó entrar al Palacio de Gobierno los elementos de seguridad utilizaron solamente extinguidores para mantener distancia con las manifestantes, evitar su ingreso al edificio y que fueron muchas de ellas las que agredieron a los elementos.
“Es más lo visual porque es polvo para extinguidor, no hubo ningún gas, de hecho, fue al revés, los policías recibieron gas lacrimógeno por parte de algunas personas, recibieron golpes con martillos y palos”.
Señaló que en ningún momento se utilizó la violencia, sin embargo, pidió una disculpa en caso de existir un abuso por parte de alguno de los elementos.
Maximino Hernández Pulido subrayó que no se recibió ninguna alerta de personas que fueron ingresadas por alguna lesión a los hospitales de la entidad tras la manifestación, por el contrario, dos policías lesionados y dos hombres puestos a disposición y una mujer con el acompañamiento de derechos humanos.
Los detenidos, según informe del responsable de Seguridad, uno de ellos fue identificado como catedrático de universidad, y otro proveniente de la Ciudad de México, también se identificaron mujeres que pasaron la caseta de San Martín Texmelucan por la tarde.
Al ser cuestionado por este medio de comunicación sobre si continuarán o no con este tipo de estrategias para futuras marchas feministas, Maximino Hernández Pulido sólo señaló que la mejor estrategia es el diálogo
