Pese a que el informe del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) detalló que en Tlaxcala sólo se tiene registrado un feminicidio en lo que va del año, la titular del Colectivo Mujer y Utopía, Edith Méndez Ahuactzin, señaló que durante 2022 van 10 asesinatos de mujeres con características de feminicidio, sin mencionar aquellos casos que no son denunciados.

Lamentó que durante la administración estatal no se aplique el marco normativo de manera adecuada, con perspectiva de género, lo que significaría iniciar carpetas de investigación por feminicidio; por el contrario, dijo, se siguen catalogando como homicidio doloso o culposo e, incluso, como suicidio.

Detalló que al darle seguimiento a los casos desde el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), se observa que las muertes de mujeres presentan más de una razón de género que son catalogadas en el Código Penal del Estado, sin embargo, las dependencias llegan a señalar que no existen razones de género mostrando que prevalece una práctica machista en las instituciones, sin importar si se dedican a los derechos humanos o a imprimir justicia.

“No dan ni si quiera respuesta, mencionan que no hay razones de género cuando sí las hay; las mujeres son localizadas en vía pública, hay precedentes de violencia sexual, presencia de tortura, violencia, todas estas razones de género están en el Código Penal y tiene que ver con una práctica de no querer hacerlo independiente de la administración”.

De la misma forma en temas de desaparición, Alertas Amber y Alba no se tiene información de manera clara de las diferentes instituciones, así como en muchas ocasiones no se aplican las alertas, señalando que a la fecha, se tienen contemplados al menos 100 casos de desapariciones durante 2022.

“Las instituciones no están haciendo un trabajo coordinado […] no hay sentencias y las únicas que existen por feminicidios son tres de 2017 y no hay más”.

Edith Méndez Ahuactzin recordó que la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, en campaña recibió la Agenda Feminista y ninguno de estos puntos se han hecho visibles en la que va de la administración, calificando como “un cinismo” por parte de las instituciones de derechos humanos y justicia no querer atender a las familiares de las víctimas de manera adecuada.