La estrategia “Vida Saludable, Vida Feliz” que implementó el gobierno federal en todo el país ha sido destinada a 2 mil 91 personas de diversos establecimientos de comida y cooperativas de Tlaxcala a través de una capacitación para fomentar una vida saludable a los jóvenes y menores de edad.
De estos, mil 460 fueron acreditados, señaló el secretario de educación, Homero Meneses Hernández.
No obstante, para los que no lograron su acreditación se abrirá una segunda etapa de capacitación; puesto que el titular de la SEP en la entidad recordó que de no contar con la acreditación no podrán vender o distribuir sus productos alimenticios al interior de las escuelas.
“Interventores de las escuelas les pedirán la constancia de aprobación de este curso. Entonces estamos en tiempo, pero sí es importante que las personas cobren conciencia”.
La acreditación deberá concluir hasta el próximo 29 de marzo. No obstante, reconoció que dicho proyecto no será una tarea sencilla y podría generar inconformidad por parte de los padres de familia responsables de cooperativas.
Por ello, se han empezado a implementar en algunas escuelas este proyecto antes de la fecha estimada como programa “piloto”. Desde la SEPE se actúa con procesos de diálogo y conciencia con la finalidad de señalar a los padres de familia y cooperativas una etapa de ajuste en la que se beneficiarán los jóvenes en su salud.
Así también, existirán estrategias de supervisión confirmada por 220 supervisores y 27 jefes de sector, así como regidores de los municipios que, al exterior de las escuelas, vigilarán la venta de comida chatarra.
Así también, ya fueron firmados 57 municipios de los 60 para trabajar en conjunto, por el bienestar de los jóvenes. Por lo que solo restan los municipios de Huamantla, San Lucas Tecopilco y Tlaxcala, quien será el último en realizar el convenio.
Finalmente, confió en que no existirá omisión o sanción por parte de directores en la venta de comida chatarra al interior de su institución, destacando que es un comunicado a nivel federal y por el bien en la disminución de enfermedades como diabetes o anemia.
“Creemos que en 20 años esto lo vamos a ver y sus resultados con la población adulta, la cual estará mucho más sana que nosotros, que no tuvimos oportunidad en nuestra niñez”.
Destacó que entre los inconvenientes se encuentran que los padres mandan a sus hijos con comida chatarra, así como las cooperativas ya no quieren dar el monto por piso a los directores porque ya no venden este tipo de comidas.