El estadio del Besiktas, en Estambul, Turquía albergó el partido de la Supercopa de Europa, partido que se disputa cada año entre el campeón de la UEFA Champions League y el monarca de la Europa League.

En la edición 2019 el partido fue entre el Liverpool y el Chelsea, clubes que prometían un gran juego lleno de explosividad. 

Desde los primeros minutos, los dos equipos demostraron su calidad y nivel pese al poco tiempo de actividad que tienen tras el descanso veraniego.

El Chelsea aprovechó su buen momento y al minuto 36' y el francés Oliver Giroud marcaba el primero para el cuadro blue, marcador que ya no se movería en la primera parte.

Para el complemento, los dos equipos ingleses siguieron mostrando su calidad en la cancha otomana; sin embargo, al conjunto red le bastaron dos minutos para empatar el juego con un remate de Sadio Mané.

Al mantenerse el empate en los 90 minutos, el juego se fue a tiempo extra para definir al monarca europeo.

En la primera parte del complemento, el Liverpool tomó ventaja al 95' cuando Sadio Mané apareció de nueva cuenta y marcó el 2-1.

Al llegar al minuto 100 de juego, el arquero "red", Miguel San Román, cometió una falta en el área y provocó un penal a favor del Chelsea, mismo que Jorginho conectó de forma adecuada para poner el 2-2.

Tras 120 minutos de juego, los equipos tuvieron que llegar a la instancia de los penales para definir al campeón de campeones europeo.

La tanda de penales se había cobrado con efectividad hasta que le tocó al juvenil Abraham quien falló su tiro ante San Román, marcando así el final del juego.

Con este título, el Liverpool suma su cuarta UEFA Super Cup, proclamándose como el club inglés más ganador de Europa.