A la voz de “justicia, justicia”, alrededor de seis mil estudiantes de la Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) marcharon por las principales calles de la ciudad hasta llegar a Casa Aguayo, lugar en donde exigieron al gobernador, Miguel Barbosa Huerta, aclarar el asesinato de Francisco Javier Tirado Márquez, Ximena Quijano y  Antonio Parada.

A la marcha se sumaron conductores de Uber, quienes también exigieron aclarar el asesinato de José Manuel Vital, quien realizó un viaje a los universitarios, los quejosos lamentaron la ola de violencia e inseguridad que se vive en el estado y a nivel nacional, por lo que reclamaron dar con los criminales y castigarlos severamente por estos actos.

Los estudiantes de la BUAP salieron de la Facultad de Medicina y encontraron a los estudiantes de UPAEP en el Gallito, quienes hicieron un largo contingente hasta llegar a Casa Aguayo, donde se reunieron con el gobernador, a quien le pidieron reforzar las acciones se seguridad para que no ocurran estos actos.

Los acuerdos, después de una reunión con el mandatario local fueron tomar acciones para la prevención del delito “alrededor de nuestras facultades, el esclarecimiento del asesinato de nuestros compañeros; él se comprometió personalmente hacer una junta el día viernes, para darnos toda la información y llegar al fondo de esta investigación. El día de mañana tendremos una  reunión en conjunto con nuestros rectores para así llegar aclarar mayores puntos, que servirán para beneficio de todos nosotros como estudiantes”, dijo uno de los estudiantes.

Los docentes, padres de familia y ciudadanos pidieron frenar la ola de violencia y endurecer las penas a los delincuentes, pues en los últimos años este problema ha crecido de forma alarmante y los universitarios son cada vez más las víctimas.