La empresa concesionaria Promotora Ambiental (PASA), encargada del servicio de recolección de basura de la zona norponiente de la ciudad, así como un hospital público de la capital poblana fueron multados con 200 mil pesos cada uno por contaminar el relleno sanitario de Chiltepeque con desechos biológico-infecciosos.
La empresa concesionaria trasladó al tiradero municipal jeringas, sueros, medicinas y otros componentes médicos de un hospital público sin tener la precaución para su depósito, ya que hay lineamientos establecidos para separar desechos altamente tóxicos y no sean almacenados al aire libre.
Esto fue confirmado por el secretario de Medio Ambiente y Servicios Públicos del municipio, Alejandro Fabre Baldini, quien explicó que tanto la empresa como el hospital fueron objeto de la multa por poner en riesgo de contaminación grave al tiradero municipal.
El funcionario explicó que el hospital fue multado por no colocar sus desechos en bolsas rojas, identificables para los recolectores de desechos, lo cual hace más fácil su separación hacia un lugar seguro.
Sin embargo, la institución hospitalaria omitió esta regla y en lugar de almacenar sus desechos biológico-infecciosos en este tipo de bolsas, lo hizo en unas de color blanco, lo cual pasó desapercibido por los empleados de PASA, siendo hasta el momento del desalojo de la basura cuando, al reventarse las bolsas, cuando se percataron de la naturaleza de los desechos.
