Esta contaminación está alcanzando a más habitantes de la colonia; ahora la empresa comercializadora de pollo estaciona sus camiones de carga en calles aledañas a su establecimiento, incluso a lado de una escuela primaria donde los niños están en constante riesgo de contraer alguna infección por los fuertes olores y por las descargas de sangre en el lugar.
Además de lo anterior, los camiones que utilizan para la transportación del pollo refrigerado son estacionados en la vía pública obstruyendo todo un carril del bulevar Xonaca, lo cual pone en riesgo a los peatones que literalmente tienen que caminar entre los vehículos que se encuentran en circulación.
A raíz de esta situación se han incrementado los accidentes hasta en un 40 por ciento, en los cuales se han visto involucrados tanto vehículos como personas atropelladas.
Los habitantes de esta colonia, aprovecharon la visita del presidente municipal, Eduardo Rivera Pérez, para pedirle su intervención para que a través de las dependencias correspondientes se apliquen las sanciones correspondientes, la clausura del lugar o en un caso extremo la reubicación del mismo por generar todos estos daños a los vecinos.
De inmediato, el edil poblano giró instrucciones para revisar el caso y buscar alternativas de solución, esto después de 9 años de que los vecinos han esperado una solución de las autoridades.