En el marco de la inauguración del XV Congreso Nacional de la Infancia y la Adolescencia Misionera (Coniam) del país, el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, aseguró que le llena de alegría y esperanza tener reunidos a más de 8 mil menores de edad y adolescentes en la capital poblana, porque ellos son enviados de Jesús para ayudar a las personas que tienen más necesidades.

En el evento, al que asistieron los representantes de más de 29 diócesis mexicanas y representantes de las autoridades municipales y estatales de Puebla, el arzobispo aseguró que niños y jóvenes presentes en el Coniam son los enviados de Dios para ayudar a los demás integrantes de la sociedad y juntos lograr la felicidad para todos.

Sánchez Espinosa afirmó que una de las finalidades del encuentro que se realizará en la capital poblana durante cuatro días será lograr que cada vez más niños sean felices, pero eso se alcanza con el trabajo de todos y con la disposición de servir, sobre todo a quienes más necesidades tienen en la sociedad actual. Aseguró que el encuentro busca que los menores de edad y los adolescentes reflexionen, aprendan, celebren y configuren su vida conforme a los valores que inculca el evangelio a todos los ciudadanos del mundo.

Lo que se busca con el Coniam es que todos los menores de edad y los jóvenes sean auténticos discípulos misioneros de Jesucristo, “al estilo del beato Juan de Palafox y Mendoza, y de los niños mártires de Tlaxcala”.

En el evento multitudinario, realizado en el Centro Expositor de Puebla, los presentes se unieron a las oraciones del arzobispo Sánchez Espinosa, quien pidió a Jesucristo por los habitantes de la sierra Tarahumara del norte del país, quienes pasan por una de las crisis más fuertes de su historia.

Cabe mencionar que en el XV Conaim estuvieron presentes el secretario general de Gobierno del estado de Puebla, Fernando Manzanilla Prieto, además del presidente municipal de la ciudad de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, acompañado de su esposa, así como varios obispos del país, quienes compartieron con los representantes de la Iglesia católica la importancia de la palabra de Dios en la acción misionera de niños y adolescentes.

Sánchez Espinosa dijo que los niños y los jóvenes presentes en el XV Coniam que respondieron a la invitación de Jesús a través de su Iglesia, “para estar con él como una familia, y así ser cada vez mejores discípulos y misioneros suyos”. Agregó que si todos quieren ser felices, el único que puede darles esa enseñanza es Jesús, por eso reiteró que los presentes, como buenos discípulos, lo siguen porque quieren ser felices para siempre.

Dijo que “él los envía a ustedes, niñas, niños y adolescentes de México a ayudar a todas las personas a encontrarlo, de modo que viviendo los grandes valores que el evangelio nos enseña, podamos construir juntos un mundo mejor y alcanzar la dicha eterna.”

Los anfitriones
Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo de Puebla, los obispos auxiliares, los sacerdotes, los diáconos, las religiosas, los religiosos, los seminaristas y los laicos de la sede angelopolitana.