Ciudadanos de diferentes estados de la República se inconformaron por no emitir su voto en las casillas especiales donde las 750 boletas electorales se agotaron antes de las 15:00 horas en cada una de las 12 casillas en el municipio de Puebla.
Durante la jornada electoral de este domingo 1 de julio, donde se eligió al nuevo presidente de la República, senadores y diputados federales en el municipio de Puebla, la principal queja por parte de los ciudadanos fue la falta de boletas electorales para emitir el voto.
Aparte de las quejas por compra de votos y promoción de candidatos en las diferentes casillas electorales, la inconformidad de los ciudadanos fue en las 12 casillas especiales que el Instituto Federal Electoral (IFE) colocó para que mexicanos que no se encontraban en su ciudad natal emitieran su voto, ya que las 750 boletas otorgadas por cada uno de estos espacios fueron insuficientes para los miles de votantes que llegaron con la intención de hacer efectivo su sufragio. Por lo menos en los 12 puntos designados por la Junta Local del IFE fueron insuficientes, ya que por lo menos se habla de mil 500 ciudadanos que por casa una de las casillas pretendían votar, sin embargo sólo la mitad lo hizo.
De acuerdo con los ciudadanos, la queja fue porque los integrantes de las mesas realizaron el proceso de votación de manera desorganizada, ya que abrieron una hora y media más tarde la indicada por la autoridad electoral, además de la poca información sobre el número exacto de boletas electorales que había para emitir el voto. La falta de atención por los representantes del IFE fue lo que abundó en cada uno de estos espacios, ya que contrario a ir notificando a los ciudadanos hasta qué número podían votar, simplemente cerraron la entrada o colocaron una hoja de papel con la leyenda “ya no hay boletas”.
El caso más importante se registró en la casilla 1441, ubicada a una cuadra de la Secretaría de Finanzas en la colonia Azcárate, donde ante la falta de una respuesta clara y contundente los ciudadanos se enfrentaron con los representantes del IFE. Las principales quejas entre la representante del IFE y los ciudadanos fue que a las 16:00 horas únicamente habían sufragado 300 personas de las 750 que lograron emitir un voto, lo cual no daría tiempo de que todos pasaran. Hubo gente que desde las 8:00 horas votó a las 16:00, lo cual fue consecuencia de que los representantes de los partidos políticos exigieron el conteo de cada boleta, además de que en cada ciudadano se debería de ratificar su nacionalidad, lo cual sólo tardaba 5 minutos.
—Ahora dice usted que 750, no invente cosas que no son— señaló una ciudadana—. Escuche, señora, dimos las boletas que tenemos las 750, ya están dadas todos— justificaban los representantes del IFE.
—Para qué dicen que uno tiene que votar, si a la hora de la hora no permiten votar— criticó una ciudadana.
—No veo que fluya la fila, nos van a dejar votar hasta las 12 de la noche— señaló un ciudadano.
—La casilla se cierra a las 6 de la tarde— sentenció la representante.
Hubo otro grupo que defendió a los integrantes de las casillas al asegurar que se trataba de mucha gente, sin embargo esto no tranquilizó a los ciudadanos que se mantuvieron en el lugar sin saber si votarían o no.