El gobierno municipal ahora va contra otro exlíder de unidad habitacional que cometió irregularidades en su gestión. Se trata del expresidente de la mesa directiva de la unidad habitacional Agua Santa, Raúl Guerra Ramírez quien ya fue denunciado ante la Procuraduría de Justicia del Estado por usurpación de funciones.

Se comprobó que durante su gestión como representante de colonia, Guerra Ramírez desfalcó al ayuntamiento con 840 mil pesos al quedarse con los cobros por algunos servicios que no entraron a la Tesorería municipal.

Al respecto, el director de Atención Vecinal de la Secretaría de Gobernación, Eduardo Alcántara Montiel destacó que se ha logrado comprobar este desfalco en agravio de la administración municipal por lo que ya se interpuso la denuncia correspondiente.

En entrevista, reconoció que fue un error el haberlo ratificado como presidente de la mesa directiva cuando se generaron problemas con comerciantes informales que fueron desalojados de la plaza central del lugar, pues fue hasta ahora que las denuncias en su contra por irregularidades eran ciertas y hasta apenas se pudieron comprobar.

Alcántara Montiel precisó que Guerra Ramírez usurpó funciones que solamente corresponden al ayuntamiento como ejercer el cobro de servicios, espacios para ambulantes y hasta el reclamo de ciertos ingresos económicos.

En este sentido, explicó que el expresidente de la mesa directiva de la unidad habitacional se quedó con los recursos por el cobro de servicios que realizó, pero que se los quedó y nunca ingresaron a las arcas municipales por un monto de 840 mil pesos.

“Estamos por presentar la denuncia penal ya hemos hecho el análisis de lo que se dejo de percibir que es parte del peritaje que estaremos presentando en la procuraduría. Esta misma semana se presentará ante las instancias correspondientes, pues se requiere recuperar 840 mil pesos que dejaron de ingresar a las arcas municipales.”


Cabe destacar que desde el pasado 20 de diciembre, el ayuntamiento de Puebla procedió a suspender de sus funciones a Raúl Guerra Ramírez por diversas irregularidades que realizó durante los dos años anteriores.

La comuna tomó como pruebas para la remoción de Raúl Guerra el lucro que realizó durante dos años por el cobro indebido de cuotas a comerciantes ambulantes que hay en la unidad habitacional, desvío de recursos, contubernio con delincuentes que operaban en el lugar, así como permitir la invasión de áreas comunes y verdes del lugar.

Desde el 8 de abril de 2010 una de las casetas de vigilancia ubicada en la 11 Sur y 117 Poniente fue quemada por un grupo de personas que fueron agredidos por Raúl Guerra y en venganza procedieron de esa forma.

Ante la falta de seguridad en el lugar, los habitantes se convirtieron en rehenes de la delincuencia, pues a todas horas hay presencia de pandilleros que abiertamente hacían de las suyas.

Otra irregularidad cometida por Raúl Guerra era que cobraba cuotas a los comerciantes ambulantes de manera irregular los días que se instalan en la explanada de la unidad habitacional, situación, que lo hacía cometer usurpación de funciones pues esto le corresponde exclusivamente a la autoridad municipal.

Raúl Guerra se enriqueció a través del cobro de espacios para ambulantes, lucrar con programas sociales, así como agresiones a ciudadanos que han terminado en enfrentamientos en esta unidad habitacional.

Guerra Ramírez fue denunciado personalmente ante instancias judiciales luego de haber agredido a madres de familia quienes solicitaban información sobre cursos que se darían en la Secretaría de Desarrollo Social.

Esta persona agredió a dos mujeres cuando exigieron la prestación y requisitos para la inscripción al programa social, sin embargo, debido a que estaba condicionando los apoyos, fue acusado y detenido por policías municipales.

Sin embargo, después de pagar una multa de 6 mil 500 pesos, obtuvo su libertad y regresó a la mesa directiva a seguir delinquiendo para mantener su poder.