La constructora SARE, una de las más denunciadas en Puebla, intenta retirar un generador de luz que hace funcionar la bomba que abastece de agua a la comunidad, misma que lleva varias semanas sin el servicio.
Los inconformes argumentaron que la inmobiliaria no ha cumplido con el compromiso de ponerse al corriente de los adeudos que se tienen con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para poder suministrar la energía eléctrica para dotar del vital líquido a los habitantes.
Destacaron que además de que la empresa se niega a pagar los adeudos a la CFE, ahora quiere llevarse el generador de energía que se encuentra en el lugar, para dejar sin servicio de agua potable a los habitantes.
“Ante la falta de energía, la empresa SARE decidió adquirir un generador de energía que cuesta una gran cantidad. Ahora la empresa se quiere llevar el generador. Nosotros no lo vamos a permitir.”
Esto ha ocasionado que los vecinos reciban el servicio del agua potable una vez a la semana solamente, por lo que tienen que hacer gastos onerosos por la compra de pipas, para abastecer sus domicilios.
Aseguraron que había un acuerdo con la inmobiliaria, en el que SARE estaba comprometida a pagar el adeudo con la CFE para restablecer el servicio, situación que desde el año pasado no ocurrió.
La inmobiliaria ha dejado sin el suministro de agua potable a este fraccionamiento, ya que sin justificación alguna dejó de pagar a la CFE más de 75 mil pesos por el cobro de luz de la bomba que surte a las familias, provocando que desde hace semana y media no se surta vital liquido.
Los inconformes manifestaron que incluso los representantes de SARE los han amenazado con abandonarlos a su suerte, ya que les advirtieron que en breve se irán del estado sin importarles la mala situación por la que pasan estas familias.
Ante la falta de agua, los vecinos deben adquirir pipas de agua, en las cuales gastan por lo menos 800 pesos en cada pipa, cuando la economía de las familias es precaria.
En consecuencia, la constructora de casas instaló una planta generadora de energía para evitar el pago y que se hiciera cargo de poner en funcionamiento la bomba, sin embargo, ahora amagan con quitarla de nueva cuenta.