Será hasta dentro de unos meses cuando se consolide el reordenamiento de la plazuela de Los Sapos debido a que al menos cuatro empresarios interesados en invertir en la apertura de nuevos restaurantes y hoteles en la zona aún siguen remodelando sus espacios.
En conferencia de prensa, junto con los empresarios, el director de Desarrollo por una Ciudad Competitividad de la Secretaría de Desarrollo Económico y Turismo del municipio de Puebla, Walter Junghanns, admitió que a pesar de que las acciones de reordenamiento integral se realizaron durante la presente administración, fue imposible dejar concluida esta propuesta dentro de la actual administración.
Destacó que los permisos, licencias y la renovación de los lugares tardarán un par de meses, ya que los trámites son muy lentos y el lugar estaba en pésimas condiciones.
Indicó que todos los establecimientos cuentan con permiso de restaurante-bar, pero además instalarán galerías para que se expongan obras de arte, situación que permite redignificar los espacios y, por ende, atraer turismo nacional y extranjero.
En este sentido, el director de Desarrollo Económico por una Ciudad Competitiva destacó que esta administración sentó las bases para que la siguiente culmine y opere el rescate de Los Sapos.
El funcionario municipal detalló que este proyecto consta de cuatro ejes: el Mejoramiento de la zona, Cambio de giros comerciales, Reorganización de espacios públicos e Intervención urbana.
Walter Junhanns abundó que de aquí hasta que termine la administración seguirán los tianguistas en la plazuela hasta que abran los restaurantes, posteriormente deberán retirarse.
“No era un proyecto aislado sino integral, es decir, se inició con la puesta en marcha del corredor peatonal del mercado Analco a la Catedral, posteriormente se puede recorrer Los Sapos, en donde trabajan 110 tianguistas con permisos, e irse al callejón John Lennon, y para terminar, al zócalo”.
Invierten empresarios 5 millones de pesos
Cabe destacar que los empresarios que abrirán nuevos negocios en Los Sapos aseguraron que en promedio invertirán más de 5 millones de pesos, mismos que generarán más de 50 empleos directos.
Los inversionistas informaron que no encontraron obstáculos para la edificación de estos espacios; sin embargo, cabe la pena mencionar que el proyecto de rescate integral lleva algunos meses de retraso.
Recordaron que Los Sapos era una “zona fea” donde los meseros se peleaban, atacaban a la gente y se ponían de acuerdo los cuidadores de coches para asaltar a la gente.
Proyecto de mejoramiento contempla 4 vertientes
1. Mejoramiento de Los Sapos. Se creó un corredor peatonal entre el mercado de Analco y la Catedral en donde los sábados y domingos se hizo peatonal.
2. Cambio de los giros comerciales. Se adecuaron y se lograron cerrar las cantinas de “mala muerte” y en su lugar se instalarán restaurantes familiares resaltando las galerías y la cultura.
3. Reorganización de espacios públicos. En este sentido, se les dio certidumbre a los inversionistas al quitar el tianguis de Los Sapos como un mercado temporal y a partir de julio de 2013 se les dio certeza al quedar solamente 80 tianguistas en la plazuela y 110 en la 5 Oriente, para que de esta forma se puedan colocar sombrillas sobre la plazuela.
4. Intervención urbana. En este tema se colocó iluminación y se arreglaron las fachadas para dar una mejor imagen.
Ni un antro más en Los Sapos
Por su parte, el director de Normatividad Comercial, Luis Mora Velasco, recordó que desde 2011 notificaron a los dueños de los establecimientos del cambio de giro comercial, y ya para 2013 iniciaron con dos clausuras porque hicieron caso omiso a las recomendaciones, mientras que 10 cerraron por voluntad propia.
Destacó que también se censó a los bares desde el ingreso de la actual administración, se les notificó que tenían que reorientar su giro para que se convirtieran en espacios atractivos y culturales, y la mayoría fueron cerrados por no cumplir con esta regla.
“Lo primero que hicimos fue cerrar los antros y buscar nuevos giros para cambiar la imagen de este espacio, pues anteriormente (2013) sólo se observaba la venta de alcohol, provocando con ello inseguridad”.