El abogado laboralista Abelardo Cuéllar Delgado describe la situación que guardan los trabajadores en el estado de Puebla, como parte de la intensificación de la agenda neoliberal: control de los tribunales laborales, crecimiento de empresas que contratan por outsourcing y despido indiscriminado de trabajadores al servicio del Estado.
Además, la persecución y despido de trabajadores y la desaparición de sindicatos con direcciones democráticas.
Cuéllar Delgado estima que la aplicación de las recetas neoliberales en Puebla ha convertido al estado en un laboratorio de este modelo económico. “Aquí lo que pasa es que el gobernador ha mandado señales de que cualquier dirigencia sindical y él puede garantizar una dirigencia afín despidiendo a todos los que sean disidencia. Eso se vivió hace dos años y medio con la desaparición del sindicato de trabajadores al servicio del estado. Y se vivió con la desaparición del sindicato de trabajadores del Hospital del Niño Poblano; se logró con el despido de muchos aspirantes a sindicato del ISSSTEP y se logró con el control de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, para que los juicios sean largos y se desanime a los trabajadores. Esas son las condiciones que se viven en el estado de Puebla”.
El abogado Cuéllar Delgado señala que: “El modelo económico está perjudicando a los trabajadores y se busca que los trabajadores tengan mayores condiciones de gozar para su seguridad social y sus pensiones. Puede haber un cambio, yo creo que sí”.
Cuéllar considera que los trabajadores deben pasar de la protesta a la organización.
—¿Qué se puede conmemorar este
primero de mayo para los trabajadores?
—Desde mi punto de vista, creo que nos debe llevar esta fecha a la reflexión de qué es lo que podemos hacer los trabajadores frente a las reformas estructurales, somos una generación que ha crecido viendo cada primero de mayo un número de trabajadores que sale con consignas, exigiéndole al gobierno mejores condiciones de trabajo o denunciando la injusticia. Pasa el festejo y regresamos a la vida diaria de las reformas estructurales. Creo que ahora los trabajadores tienen que pasar a una etapa de acción. Si hay un trabajador indignado por lo que está viviendo él o sus compañeros de otras empresas, de su comunidad, de su estado o de otros estados tendrían que pasar a ser un ente organizador. Esto es no quedarse a que le llegue el problema encima. Se viene en el mundo laboral que estamos viendo en estos momentos reformas a la seguridad social, ya vivimos reformas al derecho a la estabilidad laboral. Se ha debilitado en gran medida la vida sindical.
—¿Qué papel juegan
los sindicatos?
—Hoy los líderes sindicales siguen actuando con mayor cinismo en una actitud de justificar las reformas a los contratos colectivos. Por ejemplo, en México, cerca del 90% tienen contratos de protección.
Esto es absurdo sostenerlo y mantenerlo. La mayor parte de los trabajadores espera saber qué hacer. La idea es que todos aquellos que están convencidos de que lo que están haciendo es injusto e ilegal deberán pasar a una etapa organizativa a través de células, formarse y compartir su información, desde la familia hasta los compañeros de trabajo. Todos somos trabajadores de una forma u otra, este primero de mayo podemos entrar al análisis que han prometido el PRI y el PAN, en las condiciones de vida de los trabajadores. Pero sus promesas han sido una mentira.
—¿Cómo funciona el aparato
de justicia laboral?
—El modelo económico está perjudicando a los trabajadores y se busca que los trabajadores tengan mayores condiciones de gozar para su seguridad social y sus pensiones. Puede haber un cambio, yo creo que sí. Los trabajadores se esperan en los tribunales laborales hasta dos o más años agotar juicios para el efecto que le seguro social les reconozca pensiones pero también los tengan que movilizar. No es justo que los trabajadores en pleno siglo XXI tengan un trato de segunda en instituciones como el IMSS, el ISSSTE o el ISSSTEP. Tenemos que exigir de manera organizada mejores servicios en esas instituciones. En el mundo laboral vemos que se multiplican las empresas outsourcing, y en esas empresas los trabajadores no tienen un sindicato que los puedan representar. Tenemos que convocar a los trabajadores del outsourcing para el efecto que se cree una coordinadora de trabajadores que rebasen a los líderes impuestos por el mismo gobierno a través de las tomas de notas como control. Los mismos trabajadores puedan alcanzar el objetivo de que se respeten sus derechos.
—¿Qué sucede en Puebla
en el terreno laboral?
—Un ejemplo masivo de trabajadores al servicio del gobierno del estado, un despido donde no se contempla ni se observa el espíritu de la ley laboral, en donde de la noche a la mañana se les deja sin empleo. Donde no se preocupan por cuidar que a los trabajadores se les pueda hacer un llamamiento previo para que en un programa de retiro voluntario muchos pudieran haber aceptado la propuesta del gobierno. Los despiden y les obligan a renunciar o los manipulan para que no presenten demanda.
El clima que yo he visto entre los trabajadores al servicio del estado. Es un clima de miedo. Están preocupados. El golpe se les dio a partir de marzo. Se puede revertir por la vía legal. Es cuestión de organizarse, formarse e informarse.
“Ningún golpe contra los trabajadores puede durar toda la vida. Todos los golpes nos deben enseñar pasar a la fase organizativa y no quedarnos nada más en la protesta, que es donde nos hemos quedado y cómo pasamos a la fase organizativa pues utilizando todos los medios que existen. Crear nuestras redes de información, creando nuestros propios círculos de lectura para analizar lo que está pasando en el país.
”Puebla es un estado donde se bloquean las direcciones sindicales democráticas. Es un estado donde se despide a los trabajadores de manera injustificada y se controla a los tribunales laborales. Porque aquí lo que pasa es que el gobernador ha mandado señales de que cualquier dirigencia sindical y él puede garantizar una dirigencia afín despidiendo a todos los que sean disidencia.
”Eso se vivió hace 2 años y medio con la desaparición del sindicato de trabajadores al servicio del Estado. Y se vivió con la desaparición del sindicato de trabajadores del Hospital del Niño Poblano, se logró con el despido de muchos aspirantes a sindicato del ISSSTEP y se logró con el control de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, para que los juicios sean largos y se desanime a los trabajadores. Esas son las condiciones que se viven en el estado de Puebla.
—¿La creación de empleos
que guarda Puebla?
—Hay estudios de distintas ONG. Si bien es cierto se han multiplicado los empleos. Las condiciones de las nuevas condiciones de trabajadores, vía empresa outsourcing, muchas veces se les contrata con un salario menor al que reciben y recibe un salario formal pero ante el Seguro Social aparece con un salario menor. En estadísticas se informa que se han multiplicado los empleos pero la estabilidad no, y estamos viendo que con las reformas estructurales se vienen importantes despidos en Pemex. Una reforma estructural en el IMSS. No se diga de aquellos garantizados sus pensiones dinámicas para que sus pensiones no sean dinámicas, es un ambiente adverso pero con posibilidades, insisto, de que les anime. De que los motive a organizarse y que comprendan que esta lucha es de largo plazo y se puede ganar.
—Pero los trabajadores de los países industrializados
cuentan con seguridad social y otros derechos laborales...
—En este mundo globalizado y neoliberal que están viviendo los trabajadores se está permitiendo que ellos vean que tanto los gobiernos y los empresarios no los ven como seres humanos, sino como una mercancía, a la que ha que agregar el costo del producto terminado que en cualquier fábrica dentro del plan globalizador a Estados Unidos, mano de obra calificada y barata, y además el gobierno les tiene que garantizar a los empresarios el control de las protestas sociales para que se vea que se puede invertir sin ningún contratiempo. Los trabajadores cada vez que surge un conflicto la dinámica a la que entran es protestar en forma inmediata, después de protestar ir a tratar de hablar con algún funcionario de gobierno y después de eso viene la desesperación porque los someten a conflictos a largo plazo.
“Los compañeros trabajadores tienen que analizar el contexto económico de nuestro país y que nuestro país tiene que exigir mejoras salariales. No podemos tener tratados de libre comercio y condiciones laborales sostenidas. Pero deberíamos tener condiciones laborales iguales y programar una lucha a largo plazo para el efecto que pasan las mercancías también se pueda garantizar con tratado de libre comercio”.