En los alrededores del Jardín de El Carmen, el ayuntamiento de Puebla instaló mantas plastificadas para hacer cumplir el decreto del gobernador Miguel Barbosa, derivado de la pandemia Covid-19. 

Los vendedores de antojitos y chucherías por segundo año consecutivo, no pueden estar en ese amplio perímetro de la ciudad.

En los alrededores del templo de Nuestra Señora de El Carmen se puede observar las advertencias de la dependencia para restringe la venta que tradicionalmente se realiza este viernes 16 de julio.

“Por disposición oficial queda prohibido el comercio en vía pública con motivo de las fiestas y celebraciones patronales hasta nuevo aviso”, se lee en mantas plastificadas. 

Además se estacionaron camionetas de la Secretaría de Gobernación con personal para impedir que los ambulantes se instalen. 

La determinación del ayuntamiento procede del aumento de los casos de SARS-CoV-2, para ajustarse al decreto del gobernador, Miguel Barbosa. 

Además la autoridad de la Arquidiócesis de Puebla limitó el ingreso de los fieles a 60 personas por cada celebración religiosa.