Paliar la crisis económica nacional, afecta a todos los segmentos de la población, como a escuelas de educación especial dedicadas a ayudar a niñas y a niños, que necesitan de recursos extras para mantener su operación.

La directora de la Escuela Niño Pablo Armenta, Leticia de la Allata, recuerda que los gastos siempre los tendrán escuelas grandes y pequeñas.

Subrayó que esta institución educativa se encuentra trabajando con niños y niñas, desde hace 60 años.

Esta escuela de educación especial, durante su comienzo, empezó ayudando a personas con poliomielitis, pero con el pasar del tiempo amplió su panorama hasta convertrse en escuela de educación especial.

La escuela cuenta con un servicio especializado y es una escuela regular, pero con múltiples adecuaciones curriculares para trabajar con psicólogos con licenciatura en educación especial.

El inmueble localizado en la 13 Poniente 505, Centro Histórico, con sus psicólogos atiende a niñas y a niños con déficit de atención, déficit de conducta, discapacidad intelectual, niños con autismo, niños Down y con problemas motores.

Fundada hace seis décadas, con acompañamiento de los Rotarios, ahora enfrenta el reto de mantenerse con sus 30 alumnos en el panorama educativo nacional, pero se mantiene con estrategias para hacerse de recursos como kermés en donde las familias ofrecen desde chalupas, frutas hasta lsinas como golosinas en compañia de la tómbola.

La escuela tiene más de 60 años surge Al principio para niños con poliomielitis después se fue transformando y yo la he ido apoyando hasta que queda al final con nosotros, al principio con comenzó también con niños con parálisis cerebral.

Recordó que cuando comenzó la escuela comenzó con el Club Rotario, después con la participacion de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y en los últimos 25 años la directora lo sigue apoyando en compañía con el Club de la Salud que nació en 1993.

Durante los últimos 25 años De la Llata, se encarga de mantener en funciones este inmueble escolar para dar clases de nivel primaria, pero ayúdan también a chicas y a chicos que quieren continuar sus estudios hasta la preparatoria.

"Hemos sido incorporando más servicios  pero la idea es que cada niño desarrolle sus habilidades y su conocimiento".

En clase de actividades educativas también cuenta con asesorías y cursos en materia de violencia de género para padres de familia y  personas en general.

"Además en ocasiones nos refiere el Instituto Poblano para dar terapias y ayuda psicológica, y apoyamos con esto al sector público".