La pintora y escultora mexicana Marysole Worner Baz, quien formo parte de la llamada "Generación de la Ruptura", falleció la víspera a los 77 años, informó hoy el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

La también artista visual fue velada en su casa en el fraccionamiento Las Cabañas, en el estado de México. Se prevé que los restos sean incinerados este lunes en el municipio de Tultitlán, en la misma entidad.

Nacida en la Ciudad de México, el 17 de agosto de 1936, en el seno de una familia dedicada a la pintura, Marysole Worner mostró su talento a temprana edad; a los ocho años creó su primer claroscuro donde se observa a una serie de personas con una hoguera en medio.

Su formación autodidacta, su cercanía con artistas extranjeros mayores a ella y el lanzamiento inicial de su carrera en Francia, le permitieron mantenerse al margen de las diferencias entre los artistas plásticos en México en las décadas de los cincuenta y los sesenta del siglo XX.

Descubierta por la crítica de arte Margarita Nelken, Marysole Worner montó su primera exposición en 1955. Por afinidad y convivencia fue relacionada con los artistas europeos exiliados en México, como Remedios Varo, Leonora Carrington, Vlady, Mathias Goeritz, Francisco Moreno Capdevilla y Benito Messeger.

A pesar de su creciente éxito y ampliación de sus medios de expresión le sobrevino una época en la que no produjo; posteriormente, en los setenta, regresó con una nueva visión, lo que le valió exposiciones en el Palacio de Bellas Artes, el Museo de Arte Moderno, el Museo del Chopo, entre otros.

Entre sus obras destacan sus óleos con espátula, tallas en madera y grabados policromáticos.

Este año, Marysole Worner Baz sufrió un derrame cerebral y el pasado 20 de marzo anunció la donación de su acervo a la Fundación Carlos Slim conformada por 300 piezas entre escultura en metal y piedra, óleos y dibujos que abarcan seis décadas de creación.