El quehacer cultural de Puebla en las últimas dos décadas no se entendería sin la aportación del Museo Amparo. En el antiguo hospital de San Juan de Letrán emerge un ágora fundamental para el arte y la cultura, el cual celebra este año su 25 aniversario.
Aquí la fotogalería del Museo Amparo
En el icónico inmueble converge pasado y presente, el Amparo es un museo privado fundado por Manuel Espinosa Yglesias y su hija Ángeles Espinosa Yglesias Rugarcía. El objetivo del recinto cultural es el de conservar, exhibir, investigar y divulgar el arte prehispánico, virreinal, moderno y contemporáneo.
Ubicado en un edificio virreinal (cuya construcción data de 1538), en el primer cuadro de la capital poblana, alojó el antiguo hospital de San Juan de Letrán, siendo la primera institución de salud de la ciudad. Posteriormente, el conjunto de edificios que conformaron al hospital se transformaron en otras instituciones y en casas-habitación. En la década de los ochentas dichos edificios fueron intervenidos y unificados con un proyecto de rescate arquitectónico bajo la dirección de Pedro Ramírez Vázquez; posteriormente, en el año de 2011, el patronato de la Fundación Amparo comenzó un proyecto de remodelación a cargo de TEN Arquitectos, encabezados por Enrique Norten, “cuyo propósito es ofrecer una nueva experiencia al público, brindando instalaciones óptimas para ofrecer mejores servicios y una mejor experiencia a los visitantes”, refiere Ramiro Martínez Estrada.
A decir de José Antonio Alonso Espinosa, presidente de la Fundación Amparo, este proyecto busca colocar al recinto como un ícono del estado y del país, tal como ocurre en algunos museos reconocidos a nivel internacional, donde sus turistas buscan como referente al llegar a Roma o Paris, por mencionar solo un ejemplo.
Actualmente, el Museo Amparo cuenta con salas para la exhibición de su acervo de arte prehispánico, conformado por mil 700 piezas, uno de los más importantes en el país de una institución privada. Además, de la colección de obras de arte virreinal y de los siglos XIX y XX; presenta un programa permanente de exposiciones temporales nacionales e internacionales y un intenso programa de actividades académicas, artísticas, educativas y lúdicas dirigidas a todo el público.
El discurso museográfico de las salas de arte prehispánico ofrece a los visitantes una introducción a la cultura y la historia del México antiguo: su marco geográfico, los grandes rasgos del proceso histórico, su pensamiento religioso, la representación de la figura humana y su expresión, su vida económica, el trabajo y las relaciones sociales, sus formas de escritura, las expresiones artísticas y el culto a la muerte.
En las salas conviven piezas de diferentes culturas, épocas, formatos y materiales; su riqueza muestra la pluralidad de técnicas implementadas por las antiguas culturas religiosas de México; desde tallado en piedra, labrado en hueso, fundido en oro y otros metales, hasta cerámica y fragmentos de pintura mural que, en su conjunto, permiten conocer algunas características de la civilización mesoamericana desde el año 1200 AC hasta 1500 DC.
Actualmente se presentan 500 objetos artísticos, ceremoniales y suntuarios y funerarios provenientes del occidente de México, de la cuenca de Balsa, de algunas localidades del valle de México, como Tlatilco, Teotihuacán, Tula y Tenochtitlan. Se presentan también ejemplares del centro de Veracruz, de la cuenca del Usumacinta, de Campeche, del valle de Oaxaca. Dichos objetos representan a la cultura olmeca, huasteca, maya, teotihuacana, nahua, mezcala, zapoteca y del Tajín.
La colección de arte virreinal y siglo XIX está conformada por obras realizadas durante el período novohispano (1521-1821) y en el México independiente (hasta 1900). Esta colección permite vislumbrar diferentes momentos de la vida de las obras, la “creación” de las piezas, la forma en que fueron usadas y a veces veneradas y las funciones adquiridas en nuevos entornos. Se han reunido piezas de muy variadas técnicas, como un muestrario de la diversidad artística de nuestro país en estos períodos históricos. El recorrido por las salas permite asomarse también a los espacios del pasado y apreciar, desde nuestras —desde nuestras miradas actuales— las pinturas, esculturas, muebles y artes útiles que se conjugan para crear una vivencia al aire familiar e íntimo que conserva su distribución como casa.
Además, el Museo Amparo genera y ofrece un programa permanente de exposiciones temporales nacionales e internacionales, abordando diversas temáticas y exhibiendo los variados lenguajes del arte contemporáneo. Las exposiciones se acercan a diferentes materias, entre ellas: arqueología, historia, fotografía, arquitectura, diseño, cerámica, grabado, performance, entre otros medios, dando cabida a propuestas curatoriales de investigadores que encuadren miradas innovadoras al arte y a las manifestaciones culturales.
Hace un par de meses, el ahora secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, sostuvo que desde su concepción el Museo Amparo es un referente de calidad, compromiso con México, así como de vigencia y capacidad de transformación. “En el museo los visitantes pueden encontrar obras del arte virreinal y de los siglos XIX y XX; además, una lectura fundamentada y rica de la evolución cultural de México, a través de su acervo”.
Hoy, el Museo Amparo goza de cabal salud y es pilar fundamental en la actividad cultural del país y con un discurso museográfico definido, ajeno a las políticas sexenales.
Tome nota
En los últimos años, el museo Amparo alojó las exposiciones de:
- Julio Galán
- Yishai Jusidman
- Betsabeé Romero
- Jan Hendrix
- Manuel Álvarez Bravo
- Graciela Iturbide
- Kati Horna
- Gabriel de la Mora
- Marcela Armas
- Mathias Goeritz
- William Kentridge
El apunte
El Museo Amparo vio la luz en febrero de 1991. En sus salas resguardan obras de arte prehispánico, virreinal, moderno y contemporáneo de México.
A detalle
A más de dos décadas de su concepción, de acuerdo a registros internos, el Museo Amparo recibe al año más de 80 mil visitantes y atiende a una población de 12 mil personas en sus talleres, diplomados, conferencias, cursos y otras actividades.
Actualmente, el recinto alberga las obras de Elena Damiani, con la exposición Testigos: un catálogo de fragmentos, y por Verónica Gerber con la propuesta expositiva y monumental de Los hablantes. Las exposiciones forman parte del programa curatorial Intemperie sur, organizado por el Museo Universitario Arte Contemporáneo, la UNAM y el Museo Amparo.
Sobre su acervo
El Museo Amparo cuenta con acervo de mil 700 piezas de arte prehispánico, considerada como la colección más importante que alberga un museo privado en México. Además, de mil 300 obras de arte virreinal de los siglos XIX, XX y XXI; así como sus diferentes colecciones de arte moderno.