Fue el obispo Juan de Palafox y Mendoza quien, en 1640, compró en 50 pesos la imprenta que ese mismo año trajo a Puebla y no Pedro Quiñones, como ha asegurado el cronista Francisco Pérez de Salazar. El descubrimiento fue realizado por el investigador español,  Ricardo Fernández García y se publicará en la prestigiosa revista cultural internacional, Estudios Indianos en el artículo de fondo intitulado Miscelánea Poblana y Palafoxiana.

Pedro Ángel Palou Pérez, cronista de Puebla, detalló que de esta forma las tesis generadas por los investigadores Efraín Castro Morales y Marina Garone Gravier, sin aportar pruebas sobre el supuesto de que el impresor de esa época Juan Blanco de Alcázar trajo a la Puebla de Los Ángeles el invento del alemán  Gutenberg se vienen abajo.

En conferencia de prensa, recordó que el cronista Francisco Pérez de Salazar fue el que se empecinó en entregar datos sobre la supuesta aportación de Pedro Quiñones al mundo de la literatura y las letras de la segunda capital más importante en esa época, después de la Ciudad de México.

Pero fue el ahora beato Juan de Palafox y Mendoza quien puso los  50 pesos y ordenó a Juan Blanco, en 1640, traer la imprenta a la Angelópolis para comenzar a imprimir libros y hojas para mantener informada y documentada a la población.

Pedro  Ángel Palou ponderó el trabajo de Ricardo Fernández García al destacar que con este nuevo descubrimiento concluye toda una época de mala información histórica y cultural en beneficio de los poblanos y del mundo.

Puebla por medio de Juan de Palafox se convirtió en el Continente Americano en la tercera ciudad del mundo de habla hispana en tener una imprenta, la primera se ubicó en Ciudad de México y la segunda en Perú.

“Yo quiero pensar que el primer libro, con el dato de que los primeros 30 libros que se imprimieron de 1640 a 1649 son de la autoría de Palafox, que es Palafox también, por lógica, pensar que es autor del primer libro”, remató.

Juan de Palafox y Mendoza se convirtió así en el artífice de la Puebla cultural que ahora se conoce en el globo por sus grandes alcances. 

Bautizó a San José de Chiapa    

El también historiador Palou Pérez, reveló que Palafox y Mendoza bautizó el municipio que hoy arropa a la planta de la armadora de autos de lujo Audi con el nombre de San José de Chiapa en 1647.

El académico reveló que en Puebla, durante el año 1647, se realizó una “explosión” social que obligó al ahora beato Palafox y Mendoza a salir de la ciudad, recorriendo Tepeaca y hospedándose en la hacienda de San José.

Bajo ese marco de agitación social, el 5 de julio de 1647, bautizó a toda esa zona con el nombre San José de Chiapa.

El peculiar nombre de San José de Chiapa deriva de las copiosas lluvias que se registran todavía en esa zona del estado que ahora se dedicará a armar autos de lujo de exportación.

Pedro Ángel pormenorizó que con todos estos descubrimientos se logrará precisar el trabajo del virrey de la Nueva España, “en ese horizonte histórico próximamente se presentará el diario inédito en México de Palafox por el poeta Miguel Maldonado, en el cual se encontrará la investigación de cada uno de los descubrimientos”.