Un equipo de arqueólogos israelíes descubrió los restos de un palacio real en Jerusalén construido hace unos 2 mil 700 años, informó hoy jueves la Dirección de Reliquias de Israel.
De acuerdo con los arqueólogos, se trata probablemente de la vivienda de alguno de los reyes de la antigua Judá.
El equipo halló decenas de piezas arquitectónicas de caliza con relieves decorativos, entre ellas capiteles de varios tamaños con motivos reales y símbolos característicos de los antiguos reinos de Judá e Israel.
Según la entidad, es la primera vez que se descubren modelos reducidos de los capiteles gigantes de ambos reinos incorporados a las puertas del palacio real.
La colección incluye tres capiteles completos de tamaño mediano que servían para decorar el patio o apoyar los balcones. Otras piezas, con encabezados diminutos, adornaban los marcos de las ventanas y estaban colocados sobre pilares ornamentados bajo los alféizares de las ventanas.
"El nivel de trabajo artesanal de estos capiteles es el mejor hasta la fecha, y el nivel de conservación es raro", añadió el organismo.
A diferencia de los capiteles, el resto del edificio fue destruido, probablemente en la toma de Jerusalén por Babilonia en el 586 a.C.
Según el equipo, los hallazgos apuntan a la restauración de Jerusalén tras el asedio asirio de la ciudad en el 701 a.C., durante el reinado de Ezequías.
"Este descubrimiento agrupa villas, mansiones y edificios gubernamentales fuera de los muros de la ciudad, un testimonio de que los residentes se sentían ya seguros tras el asedio asirio", concluyeron los especialistas.