Dueños de los equipos de la NBA y el sindicato de jugadores sostendrán dos reuniones, domingo y lunes, para poner fin al paro laboral e intentar salvar la liga estadounidense de basquetbol, que debería comenzar el próximo 1 de noviembre.

En la reunión que sostuvieron el martes pasado se anunció que quedaba suspendida por completo la pretemporada y que a partir del próximo lunes se comenzarían a cancelar los partidos de temporada si no se lograba un acuerdo.

Aunque Billy Hunter, director de la asociación de jugadores, había señalado que no habría más reuniones, al parecer no será así, según reportes de la prensa local.

Las reuniones que mantendrán estos dos días serán con menos personas en busca de lograr un acuerdo lo antes posible, ya que la situación se encuentra en el punto más crítico y se comenzaría a modificar el calendario de la temporada al eliminar los primeros partidos.

El motivo porque este paro no termina se debe a que propietarios y jugadores no llegan a un acuerdo en el aspecto económico, ya que los dueños sólo quieren destinar el 50 por ciento de ingresos al salario de los basquetbolistas, mientras que ellos quieren más del 50 por ciento.