Monterrey de México no aprovechó las ocasiones de gol que tuvo y al final fue eliminado en serie de penales 4-3, tras empatar 1-1 luego de 120 minutos, por el Kashiwa Reysol de Japón, en los cuartos de final del Mundial de Clubes 2011.

Luis Pérez y Jonathan Orozco se convirtieron en los “villanos” al fallar desde el manchón penal y así terminar con el sueño de Rayados por trascender en este evento internacional, en el que una vez más un equipo mexicano se queda fuera en estas instancias.

La escuadra japonesa se verá las caras en semifinales con el campeón de la Copa Libertadores de América, el Santos de Brasil, mientras que Monterrey disputará el quinto puesto con el equipo Esperance Sportive de Túnez.

Antes de partir a tierras niponas, el delantero Aldo de Nigris afirmó que sería un fracaso no conseguir el título del certamen, y aunque era algo muy complicado, quizá nunca pensó que el equipo “azteca” terminaría su sueño en las primeras de cambio tal y como ocurrió.

Pese a cumplir casi un mes sin jugar un partido oficial, Monterrey buscó y logró marcar el ritmo del encuentro durante los primeros minutos, y pudo haber inclinado la balanza a su favor, pero su falta de contundencia provocó que el partido tuviera que irse hasta sus últimas instancias.

El primer aviso se dio cuando apenas en el tercer minuto de acción tras un pase filtrado para el chileno Humberto Suazo, quien mano a mano con el portero Takanori Sugeno se abrió demasiado para dejar escapar una gran oportunidad.

Cuando se cumplía el primer cuarto de hora Suazo tuvo una vez más la ocasión para adelantar a su equipo, no obstante, su remate se estrelló en la base del poste derecho cuando tenía para más.

Después de esta nueva falla del “andino”, el cuadro japonés equilibró el duelo y la posesión del esférico, pero sin la cohesión necesaria de medio campo al frente para pisar con fuerza la meta defendida por Jonathan Orozco.

Haber perdonado durante los primeros 45 minutos le cobró factura al cuadro regiomontano, pues el conjunto nipón terminó con el cero en el marcador en lo que fue prácticamente su primer arribo.

Un centro de Junya Tanaka por derecha fue prendido con una espectacular volea del brasileño Leandro Domingues para dejar sin oportunidad a Orozco y poner el 1-0 al minuto 53.

Tras unos momentos de descontrol, el monarca de la Concacaf asimiló bien este duro golpe y cinco minutos después Suazo ya no perdonó para poner el 1-1.

Todo se originó en un pase filtrado por derecha para el argentino César Delgado, quien metió a segundo poste el balón, donde el “Chupete” Suazo llegó para cerrar y prender un remate de zurda para así vencer a Sugeno.

La paridad en el marcador se reflejó también en la cancha, donde ambos equipos sostuvieron una feroz lucha en el centro del campo sin que ninguno de los dos pudiera imponer condiciones, lo que obligó al alargue.

Durante los tiempos extras ninguno pudo hacer algo para evitar la definición de los penales, donde los anfitriones fueron más certeros y dejaron en el camino a un Monterrey que se convierte en otro equipo mexicano que fracasa en el torneo internacional de clubes.

El arbitraje estuvo a cargo del neozelandés Peter O’Leary, quien tuvo una labor mala al perdonar algunas tarjetas amarillas. Amonestó a Ryoichi Kurisawa (21), al brasileño Leandro Domingues (26) y a Wataru Hashimoto (83) por los locales; Darvin Chávez (40) y el argentino José María Basanta (102) vieron cartón preventivo por los visitantes.

Alineaciones:

Kashiwa Reysol.- Takanori Sugeno, Naoya Kondo, Hiroki Sakai, Tatsuya Masushima, Hidekazu Otani, Leandro Domingues, Jorge Wagner, Junya Tanaka, Masato Kudo (Ryohei Hayashi, 106), Wataru Hashimoto y Ryoichi Kurisawa. DT Nelsinho.

Monterrey.- Jonathan Orozco, Ricardo Osorio, José María Basanta, Hiram Mier, Darvin Chávez (Walter Ayoví, 91), Jesús Zavala, Luis Pérez, Neri Cardozo (Sergio Pérez, 100), César Delgado, Sergio Santana (Aldo de Nigris, 96) y Humberto Suazo. DT Víctor Manuel Vucetich.