Inspirado por los logros de Eduardo Nájera, Jorge Gutiérrez cruzó ilegalmente a Estados Unidos cuando tenía 15 años edad.

Ayer, ocho años más tarde, logró algo que su ídolo jamás conquistó en el basquetbol de Estados Unidos y de paso hizo historia para el basquetbol mexicano al ser nombrado Jugador y Defensivo del Año de la Conferencia Pac-12 del baloncesto universitario.

Con hambre de triunfo como su única compañera, Gutiérrez dejó el seno familiar en su natal Chihuahua para irse a vivir a Denver, donde se enroló en la preparatoria Lincoln, hospedado a lado de Héctor Hernández y otros basquetbolistas mexicanos.

La preparatoria Lincoln, en el corazón de Denver, no pregunta por el estado migratorio de sus estudiantes y así fue como Gutiérrez pudo brillar antes de ser reclutado por la Universidad de California en Berkeley, un suburbio localizado en el área de la bahía de San Francisco.

Gutiérrez, quien fue preselecionado para los Panamericanos de Guadalajara, pero declinó de último momento, ya superó como colegial a Nájera, quien tuvo una brillante carrera con los Sooners de Oklahoma entre 1996 y 1999.

l máximo logró de Nájera, quien ha tenido una lóngeva carrera en la NBA, fue ser nombrado tercer equipo de EU y también se llevó el premio Chip Hilton, que entrega el Salón de la Fama al jugador que muestra el mejor carácter dentro y fuera de las duelas.

Información de El Universal